{"id":37308,"date":"2023-08-31T04:47:32","date_gmt":"2023-08-31T11:47:32","guid":{"rendered":"https:\/\/www.despertarmagia.com\/cual-es-tu-lugar-al-que-acudir\/"},"modified":"2023-08-31T04:47:32","modified_gmt":"2023-08-31T11:47:32","slug":"cual-es-tu-lugar-al-que-acudir","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/www.despertarmagia.com\/cual-es-tu-lugar-al-que-acudir\/","title":{"rendered":"\u00bfCu\u00e1l es tu lugar al que acudir?"},"content":{"rendered":"
\n
\n

Es el lugar al que vamos cuando alcanzamos nuestro l\u00edmite.<\/h2>\n
\n
\n
\n
\n
\n
\n
\n
\n
\n
<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n
\n
\n
\n
\n
<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n<\/div>\n
\n
<\/div>\n<\/div>\n

Foto de Noah Buscher en Unsplash<\/p>\n

Todos tenemos un punto de ruptura, ese lugar donde la vida nos arroja demasiado y creemos que no podemos soportar ni una cosa m\u00e1s. Al igual que un programa de computadora, es un valor predeterminado emocional en el que volvemos autom\u00e1ticamente a una opci\u00f3n preseleccionada. En nuestro caso, recurrimos a viejos sentimientos y comportamientos.<\/p>\n

Cuando llego a ese punto, instintivamente encuentro a alguien a quien culpar. Te culpo a ti, al sistema, al clima; si t\u00fa o \u00e9l cooperaran y se comportaran apropiadamente, todo estar\u00eda bien. Realmente poco atractivo, \u00bfverdad? Pero ah\u00ed est\u00e1.<\/p>\n

Mi pareja y yo hemos estado en una monta\u00f1a rusa en nuestros esfuerzos por buscar una casa. Y nunca falla, cuando estoy decepcionado, mi primer pensamiento es: \u00abBueno, \u00a1desear\u00eda que no me hubiera entusiasmado tanto con esto!\u00bb. \u00bfQu\u00e9? Me emocion\u00e9 y \u00e9l no hizo nada.<\/p>\n

Su \u201cregalo\u201d puede estar furioso, inmovilizado o dando vueltas abrumado. O tal vez te conviertas en una v\u00edctima o te conviertas en un fan\u00e1tico del control, que convence, engatusa o averg\u00fcenza (a ellos o a ti) para que te den lo que quieres. La lista de juegos mentales contraproducentes e inviables que nos meten en problemas es interminable.<\/p>\n

Aprender que hacerme feliz no es trabajo de nadie m\u00e1s ha sido un desaf\u00edo para toda la vida.<\/p>\n

En el fondo, todav\u00eda tengo esta creencia insidiosa de que ES tu trabajo hacerme feliz. Hay un pr\u00edncipe azul. No es de extra\u00f1ar que esas creencias no funcionaran bien cuando las puse en pr\u00e1ctica en mis relaciones.<\/em><\/p>\n

Existe una alternativa y no es tan complicada como podr\u00edamos pensar. Podemos establecer la intenci\u00f3n de notar cuando nuestro cuerpo se tensa en resistencia a cualquier cosa que est\u00e9 sucediendo en ese momento. Nos ponemos tensos cuando el mundo no coopera y no nos salimos con la nuestra. Entonces es cuando volvemos a nuestra respuesta habitual por defecto.<\/p>\n

Cuando noto que mi cuerpo se tensa, me detengo, respiro, ablando mi mand\u00edbula y mi vientre. Prestar atenci\u00f3n a suavizar mi cuerpo me devuelve a donde me llevaba mi mente, a un lugar de cordura, el momento presente.<\/p>\n

Con la pr\u00e1ctica, he aprendido a controlarme cuando mi mente comienza a llevarme a la tierra de \u00abPero t\u00fa…\u00bb. Esta observaci\u00f3n me ha salvado una y otra vez de convertir sentimientos moment\u00e1neos e inc\u00f3modos en…<\/p>\n<\/div>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

Es el lugar al que vamos cuando alcanzamos nuestro l\u00edmite. Foto de Noah Buscher en Unsplash Todos tenemos un punto de ruptura, ese lugar donde la vida nos arroja demasiado y creemos que no podemos soportar ni una cosa m\u00e1s. Al igual que un programa de computadora, es un valor predeterminado emocional en el que volvemos autom\u00e1ticamente a una opci\u00f3n preseleccionada. En nuestro caso, recurrimos a viejos sentimientos y comportamientos. Cuando llego a ese punto, instintivamente encuentro a alguien a quien culpar. Te culpo a ti, al sistema, al clima; si t\u00fa o \u00e9l cooperaran y se comportaran apropiadamente, todo\u2026<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"comment_status":"","ping_status":"","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[55],"tags":[],"class_list":["post-37308","post","type-post","status-publish","format-standard","hentry","category-relaciones"],"blocksy_meta":{"styles_descriptor":{"styles":{"desktop":"","tablet":"","mobile":""},"google_fonts":[],"version":4}},"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/www.despertarmagia.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/37308","targetHints":{"allow":["GET"]}}],"collection":[{"href":"https:\/\/www.despertarmagia.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/www.despertarmagia.com\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/www.despertarmagia.com\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/www.despertarmagia.com\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=37308"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/www.despertarmagia.com\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/37308\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/www.despertarmagia.com\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=37308"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/www.despertarmagia.com\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=37308"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/www.despertarmagia.com\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=37308"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}