¿Qué es la gratitud y por qué es tan importante?

Hay una variedad de cosas que pueden evocar sentimientos positivos de aprecio o gratitud que pueden guiar a las personas hacia el significado y una mejor salud.

“Cultivad el hábito de ser agradecidos por todo lo bueno que os llega, y de dar gracias continuamente. Y debido a que todas las cosas han contribuido a tu avance, debes incluir todas las cosas en tu gratitud”.

Ralph Waldo Emerson

Emerson ofrece una introducción útil sobre cómo puede ser practicar la gratitud, y este artículo comenzará allí y explorará la investigación psicológica actual detrás de este valor.

La gratitud es una emoción similar a la apreciación, y la investigación de la psicología positiva ha encontrado razones neurológicas por las que tantas personas pueden beneficiarse de esta práctica general de expresar gracias por nuestras vidas, incluso en tiempos de desafío y cambio.

Sin embargo, para comenzar, debemos definir qué entendemos por «gratitud».

Antes de continuar, pensamos que le gustaría descargar nuestros tres ejercicios de gratitud de forma gratuita. Estos ejercicios detallados con base científica lo ayudarán a usted o a sus clientes a conectarse con emociones más positivas y disfrutar de los beneficios de la gratitud.

¿Qué es la gratitud? 10 definiciones

Muchos de nosotros expresamos gratitud diciendo “gracias” a alguien que nos ayudó o nos dio un regalo. Sin embargo, desde una perspectiva científica, la gratitud no es solo una acción: también es una emoción positiva que tiene un propósito biológico.

La psicología positiva define la gratitud de una manera en la que los científicos pueden medir sus efectos y, por lo tanto, argumentar que la gratitud es más que sentirse agradecido: es una apreciación más profunda por alguien (o algo) que produce una positividad más duradera.

Antes de continuar con esa definición, ofrecemos 10 definiciones para proporcionar un contexto cultural de cómo la palabra ha cambiado con el tiempo.

10 definiciones

Según el Diccionario Merriam-Webster, la gratitud es simplemente “el estado de estar agradecido”.

La Facultad de Medicina de Harvard brinda más detalles y escribe que la gratitud es:

“una apreciación agradecida por lo que un individuo recibe, ya sea tangible o intangible. Con gratitud, las personas reconocen la bondad en sus vidas… Como resultado, la gratitud también ayuda a las personas a conectarse con algo más grande que ellos mismos como individuos, ya sea con otras personas, la naturaleza o un poder superior”.

Esto proporciona un contexto más útil, que nos lleva a la siguiente definición de los investigadores de psiquiatría, quienes definen la gratitud como:

“la apreciación de lo que es valioso y significativo para uno mismo y representa un estado general de agradecimiento y/o aprecio”

(Sansone & Sansone, 2010).

Los investigadores también ofrecen esta definición:

“una emoción que generalmente se evoca cuando uno recibe beneficios costosos, inesperados e intencionales, y se cree que juega un papel clave en la regulación del inicio y mantenimiento de las relaciones sociales”

(Forster et al., 2017).

Otra definición simple de gratitud que proviene de la investigación en psicología es:

“una emoción social que señala nuestro reconocimiento de las cosas que otros han hecho por nosotros”

(Fox et al., 2015).

Esta definición es importante porque aporta un elemento social a la definición de gratitud.

El aspecto social de la gratitud de este teólogo dice:

“si adquirimos un bien a través del intercambio, el esfuerzo o el logro, o por derecho, entonces no solemos sentir gratitud. La gratitud es una emoción que sentimos en respuesta a recibir algo bueno que no se merece”

(Cordón, 2016).

Otra definición que enfatiza su aspecto social proviene de investigadores de psicología social, quienes afirman que:

“La gratitud es una emoción con valencia positiva que puede surgir cuando otra persona, un benefactor, hace algo amable por sí mismo.

(Algoe et al., 2016).

Un psicólogo basado en la moralidad escribe que:

“la gratitud no son bienes entregados en respuesta a un pago. Es una respuesta a un don… La gratitud, como respuesta a un don, es también una forma de generosidad, de dar crédito graciosamente al otro por algo que estrictamente no se le debe”

(Roberts, 1991).

Para comprender mejor, Robert Emmons ofrece su definición de investigación psicológica sobre el tema de que la gratitud:

“ha sido conceptualizado como una emoción, una virtud, un sentimiento moral, un motivo, una respuesta de afrontamiento, una habilidad y una actitud. Es todo esto y más. Como mínimo, la gratitud es una respuesta emocional a un regalo. Es el aprecio que se siente después de haber sido beneficiario de un acto altruista”

(Emmons y Crumpler, 2000).

Emmons explica la gratitud más profundamente en otro artículo. Él (y su coautor Robin Stern) dicen que:

“la gratitud tiene un doble significado: uno mundano y otro trascendente. En su sentido mundano, la gratitud es un sentimiento que se produce en los intercambios interpersonales cuando una persona reconoce recibir un beneficio valioso de otra. La gratitud es un estado cognitivo-afectivo que típicamente se asocia con la percepción de que uno ha recibido un beneficio personal que no fue buscado, merecido o ganado intencionalmente sino por las buenas intenciones de otra persona”

(Emmons & Stern, 2013).

Esperamos que estas definiciones de gratitud proporcionen un contexto psicológico, social y religioso para esta emoción positiva. Ya sea que esté de acuerdo con todas las definiciones o se identifique con una, ahora estamos equipados para profundizar en su papel más importante en nuestra salud y vida diaria.

En resumen, la gratitud es una emoción positiva que se siente después de ser beneficiario de algún tipo de regalo. También es una emoción social a menudo dirigida hacia una persona (el dador de un regalo) o sentida hacia un poder superior.

Si quieres probar una forma poderosa de practicarlo, consulta nuestra publicación sobre meditación de gratitud.

Sinónimos clave

Hay muchos sinónimos de gratitud, incluyendo:

  • Reconocimiento;
  • aprecio;
  • gracia;
  • gracia;
  • agradecimiento;
  • elogio;
  • reconocimiento;
  • compensación;
  • sensibilidad;
  • gratitud.

El reconocimiento, el aprecio y el agradecimiento son los más relacionados para el propósito de este artículo.

Antónimos de gratitud

El antónimo obvio de gratitud es ingratitud, pero otros antónimos incluyen:

  • censura;
  • condenación;
  • ingratitud;
  • ingratitud.

Muchas personas no son agradecidas a pesar de ser beneficiarias de un acto altruista. ¿Puedes pensar en un momento en que sentiste esto? La mayoría de la gente puede. No es una experiencia agradable para nadie.

La ingratitud priva a las personas de las recompensas emocionales de la gratitud, y este artículo espera ofrecer formas tangibles de cómo cultivar un estado de ser más apreciativo.

Dos etapas de gratitud

Según el Dr. Robert Emmons, el sentimiento de gratitud implica dos etapas (2003):

  1. Primero viene el reconocimiento de la bondad en la propia vida. En un estado de gratitud, decimos sí a la vida. Afirmamos que en definitiva, la vida es buena, y tiene elementos que la hacen digna de ser vivida, y rica en textura. El reconocimiento de haber recibido algo nos gratifica, tanto por su presencia como por el esfuerzo que el dador pone en elegirlo.
  2. En segundo lugar, la gratitud es reconocer que algunas de las fuentes de esta bondad se encuentran fuera de uno mismo. Uno puede estar agradecido con otras personas, con los animales y con el mundo, pero no con uno mismo. En esta etapa, reconocemos la bondad en nuestra vida ya quién agradecerla, es decir, ¿quién se sacrificó para que pudiéramos ser felices?

Las dos etapas de la gratitud comprenden el reconocimiento de la bondad en nuestras vidas, y luego miente cómo esta bondad vino a nosotros externamente. Mediante este proceso, reconocemos la suerte de todo lo que hace que nuestras vidas, y las de nosotros mismos, sean mejores.

Propósito de esta emoción

Las personas pueden usar la gratitud para formar nuevas relaciones sociales o para fortalecer las actuales.

Los actos de gratitud se pueden usar para disculparse, enmendar y ayudar a resolver otros problemas.

Alternativamente, las personas pueden sentirse amables porque puede ser un proceso intrínsecamente gratificante. El simple hecho de estar agradecido por estar vivo es una excelente manera de motivarse para aprovechar el día.

La idea de que el mañana no está garantizado es un fuerte motivador para que algunas personas sean «lo mejor de sí mismas» hoy.

Por qué funciona la gratitud

La gratitud es un acto desinteresado. Sus actos se realizan incondicionalmente, para mostrar a las personas que son apreciadas. “Un don que se da gratuitamente” es una forma de entender cómo son estos actos.

Por ejemplo, si alguien está triste y le escribes una nota de agradecimiento, es probable que no estés pidiendo algo a cambio para esa persona; en cambio, les estás recordando su valor y expresando gratitud por su existencia. Por el momento, no está esperando una «nota de devolución» de esta persona.

Incluso cuando no esperamos un retorno, a veces suceden. La gratitud puede ser contagiosa, en el buen sentido. En el ejemplo anterior, tal vez cuando estés deprimido, esta persona también te escribirá una nota.

Aquí hay dos procesos en los que la gratitud puede influir.

1. Catarsis

La catarsis es el proceso en el que un individuo libera emociones fuertes.

Por ejemplo, después de un evento estresante o traumático, el llanto proporciona un medio para una liberación tan fuerte que hace que la actividad sea catártica. La catarsis trabaja con gratitud.

Para ilustrar esto, considere la culpa asociada con “no cumplir” con las obligaciones. Tal vez en esta situación, expresarías gratitud a quien decepcionaste, en un intento de liberar esa culpa. Los actos están destinados a transmitir el aprecio que poseen los amigos, a pesar de una decepción reciente.

Además, las posesiones de los seres queridos fallecidos pueden proporcionar una sensación de serenidad que permite al nuevo propietario reflexionar con gratitud sobre ese objeto y, en esencia, sobre esa persona.

El uso de la gratitud sirve como agente de catarsis, donde ambas partes se sienten satisfechas al final.

2. Reciprocidad

La reciprocidad, como concepto de la psicología social, se trata del intercambio de acciones.

En este caso, se trata del intercambio de emociones positivas. Cuando alguien realiza un acto de gratitud por otra persona, a su vez, esa persona puede sentirse motivada a hacer algo amable por la persona anterior o continuar con el favor de un extraño.

Imagínese tomando un café o una comida con un amigo, y cortésmente exigen pagar la salida. Puede discutir sobre dividir la cuenta, pero si insisten, es probable que se sienta agradecido y con el deber extendido de que la próxima comida sea «su regalo».

En esencia, así es exactamente como funciona la reciprocidad.

¿Rasgo o estado?

La gratitud se considera un rasgo (disposicional) o un estado (de ser).

Como rasgo, un individuo practica la gratitud como parte de su vida diaria (McCullough, Emmons y Tsang, 2002) y se consideraría una fortaleza de carácter poseer gratitud. Como rasgo, la gratitud se puede desarrollar con la práctica y la conciencia (Peterson y Seligman, 2004).

Cuando una persona experimenta la rica emoción de alguien que expresa gratitud por ella, se le conoce como estado (Watkins, Van Gelder y Frias, 2009). La gratitud es ambas cosas: un rasgo y un estado.

El estado de ser agradecido es una experiencia placentera estudiada por los filósofos de la antigüedad. La siguiente sección proporciona un contexto más rico sobre cómo esta emoción funcionó históricamente en la mentalidad de las personas y las sociedades.

Perspectivas filosóficas sobre la gratitud

Durante al menos 2000 años, los intelectuales han estado considerando el importante papel que juega la gratitud en la vida diaria.

Filósofos antiguos y no tan antiguos, como Cicerón, Séneca y Adam Smith, predicaron la importancia de dar gracias (Fox et al., 2015; McCullough et al., 2002). Cicerón y Séneca pensaron en la gratitud como una virtud clave fundamental para cualquier civilización exitosa.

Para ser claros, no es solo antiguo y…