Foto: GramUnion vía Tumblr
Porque Nadine somos todos nosotros.
El corazón de esta increíble película reside en su personaje principal, Nadine (Hailee Steinfeld). Es lo suficientemente consciente de sí misma como para saber que es diferente, pero no tiene ni idea de cómo cambiarlo. Oye las palabras insultantes y crueles que salen de su boca, pero no puede detenerlas. Su vida es un desastre que ella misma ha creado, pero culpa a todos los que la rodean por no entender quién es ella realmente en el fondo.
“Sabes”, confiesa Nadine, “desde que éramos pequeñas, tenía esta sensación como… como si estuviera flotando fuera de mi cuerpo, mirándome a mí misma… y odio lo que veo… cómo estoy actuando. la forma en que sueno. Y no sé cómo cambiarlo. Y tengo tanto miedo… de que el sentimiento nunca desaparezca”.
Al comienzo de la película, Nadine le entrega una nota de suicidio escrita por ella misma a su profesor de inglés, el Sr. Bruner (Woody Harrelson). Acaba de presionar «enviar» por accidente en un mensaje de texto a un chico llamado Nick que describe lo que quiere hacer sexualmente con él. Ella le muestra el texto al Sr. Bruner y su respuesta es que usa demasiadas oraciones consecutivas. Da la nota perfecta de preocuparse por Nadine pero sin firmar sus tonterías ni por un segundo.
Nadine perdió a su amado padre cuando era una niña. Se queda con una madre casi narcisista (Kyra Sedgwick) que intenta vivir la vida sin su marido y su hermano, Darian (Blake Jenner), que es el «chico de oro» de la familia. Es popular, guapo y el hijo favorito de su madre, y Nadine lo odia por eso.
La única persona que hace feliz a Nadine es su mejor amiga, Krista (Haley Lu Richardson). Krista “entiende” totalmente a Nadine y crecen juntas, compartiendo amores secretos, experimentando con el alcohol por primera vez y haciendo chistes que sólo ellos pueden entender. Se cuentan cosas que nunca podrían contarle a nadie más.
«Una vez, la solapa del pijama de mi abuelo se abrió accidentalmente», le confiesa la joven Nadine a Krista, «y vi su weiner y me puse muy triste».