Pensamiento convergente vs divergente (Definiciones + Ejemplos) –

Imagínate esto. Estás en el trabajo y tu equipo tiene un gran problema que resolver. Todos se sientan juntos en una habitación y empiezan a hacer una lluvia de ideas. A una persona se le ocurre una solución, pero otro compañero de trabajo la rechaza inmediatamente. A la siguiente persona se le ocurre una solución, y ésta también es rechazada inmediatamente. No pasa mucho tiempo hasta que todo el equipo se siente muy frustrado y agotado. ¡Nunca encontrarás una solución si todo se destroza inmediatamente!

¿Cómo puedes hacer que esta situación sea más productiva? El primer paso es aprender sobre los diferentes tipos de pensamiento. Al comprender la diferencia entre el pensamiento convergente y divergente, podrá planificar de manera más efectiva su sesión de lluvia de ideas y llegar a la mejor solución sin frustración.

Definición de pensamiento convergente y divergente

El pensamiento convergente y divergente son términos relativamente nuevos en el mundo de la psicología. Fueron presentados al mundo por primera vez en 1956 por un psicólogo estadounidense llamado JP Guilford. Estos dos enfoques cognitivos, cuando se usan apropiadamente, pueden usarse para resolver casi cualquier problema que enfrente.

Pensamiento divergente

Empecemos hablando del pensamiento divergente. Cuando piensas en “lluvia de ideas”, estás pensando en pensamiento divergente. Este tipo de pensamiento requiere que expandas tu mente y encuentres soluciones innovadoras. Las posibilidades son infinitas. El pensamiento divergente le permite ver los productos en los materiales de maneras nuevas y diferentes.

Los mapas mentales son la mejor manera de plasmar en papel los resultados del pensamiento divergente. Los mapas mentales contienen ideas que se ramifican entre sí en diferentes direcciones. No es necesario utilizar mucha lógica cuando estás en modo de “pensamiento divergente”. Recuerde, está ampliando lo que es posible, no limitándolo.

Pensamiento convergente

Ahora, volvamos al primer ejemplo. Había pensamientos divergentes: a cada persona se le ocurrió una idea “fuera de lo común”. Pero rápidamente fueron derribados. La persona que criticaba su argumento estaba en modo de “pensamiento convergente”.

El pensamiento convergente no es malo ni improductivo. ¡Es necesario! Este proceso es más analítico y «realista». Utiliza la lógica para limitar las ideas. Esta parte del proceso de pensamiento requiere buscar falacias y problemas potenciales. Al reducir las ideas que posiblemente no funcionarían, puedes encontrar una o dos ideas que funcionarán sin problemas.

Ejemplos de pensamiento convergente y divergente

Digamos que está planeando un evento y tratando de averiguar dónde realizarlo. Al ponerse su “gorra de pensamiento divergente”, comienza a realizar una lluvia de ideas. ¿Qué tan divertido sería tener el evento en Disney World? ¿O en el nuevo hotel que se está abriendo al final de la calle? ¿Qué tal una gran fiesta al aire libre con carpas? ¡Todos estos lugares podrían atraer invitados potenciales y hacer que el evento realmente se destaque!

¡Guau, estas son muchas ideas geniales!

Pero abordemos este mismo problema con nuestro «límite de pensamiento convergente». ¿Disney Mundo? Se sale del presupuesto y la mayoría de los invitados no querrán viajar tan lejos. ¿El nuevo hotel al final de la calle? Eso se acerca más al presupuesto y los huéspedes pueden viajar fácilmente hasta allí. ¿Una gran fiesta al aire libre? Esta también es una opción, pero sólo si el costo de las luces, la calefacción y las tiendas de campaña realmente se ajusta al presupuesto. ¿Necesitarías un permiso para realizar la fiesta al aire libre? ¿Tendrías que preocuparte por las quejas por ruido?

Como puede ver, ambos procesos son necesarios para llegar a una solución. No puedes simplemente poner tu corazón en Disney World sin considerar factores prácticos, como el presupuesto o la ubicación. Pero cuando se le ocurre una solución “lista para usar” que se ajusta a sus limitaciones, tiene una gran solución en sus manos.

Cómo utilizar eficazmente el pensamiento convergente y divergente

El pensamiento convergente y divergente requiere dos partes diferentes del cerebro. Mientras que el pensamiento convergente se basa más en la lógica, el pensamiento divergente se basa más en la creatividad. Cambiar de un lado a otro puede no parecer una multitarea, pero es una forma de multitarea. Y la multitarea no es tan efectiva como podría pensar.

En la reunión mencionada al principio de este artículo, su equipo alternaba constantemente entre pensamiento convergente y divergente. Su cerebro también tuvo que cambiar de un lado a otro. ¡No es de extrañar que el grupo se agotara tan rápido!

«Procesamiento por lotes»

Profesores de Harvard como Anne Manning sugieren otro enfoque del pensamiento convergente y divergente. En lugar de realizarlas en la misma reunión, intente “agrupar” sus tareas de pensamiento divergente y convergente. Tómese una hora de la reunión para que su equipo simplemente haga una lluvia de ideas. Sin críticas, sin lógica, sin pensamiento convergente. Simplemente siga ampliando las ideas sobre dónde debería realizar el evento, durante un período de tiempo sólido.

Dale un respiro a tu equipo. Este descanso podría ser un descanso nocturno: muchas personas tienen sus mejores ideas creativas cuando duermen, se duchan o piensan en otras cosas. Dígale a su equipo que escriba más ideas creativas que puedan tener y que se las comunique antes de la próxima reunión.

Luego, celebre una reunión que se centre únicamente en el pensamiento convergente. Piensa en el presupuesto. Ubicación. El número de personas que espera que asistan al evento. Podrás tachar algunas ideas de tu lista con bastante rapidez. Esta bien. Tachar elementos de tu lista rápidamente significa que llegarás rápidamente a una solución.

¡Y voilá! Has encontrado tu solución. Ahora es el momento de centrarse en otros elementos del evento. Inspirándote en tus lluvias de ideas anteriores, realmente puedes hacer que tu evento sea lo mejor posible o resolver cualquier problema de manera eficiente. Puedes decidir hacer el evento con el tema de Disney, por ejemplo, para tener un evento divertido sin desembolsar los costos de ir a Florida.

La próxima vez que tengas un problema, prueba esta técnica de procesamiento por lotes. ¡Es posible que encuentres una gran solución sin frustraciones!

Reducir las ideas

¿No tienes dos días para pensar en una idea? ¡Divide tu equipo en dos grupos y deja que comience el debate! Especie de.

Así es como funciona esta sesión de lluvia de ideas. Dé a dos equipos una cantidad determinada de tiempo (quizás entre 30 y 60 minutos) para que realicen una lluvia de ideas sin ningún tipo de desacuerdo o cuestionamiento. Escríbalos todos en el lado izquierdo de una hoja de papel. Al final del tiempo, intercambien las hojas de papel entre los dos equipos. (Es posible que encuentre superposiciones. ¡Eso es bueno!) Establezca otro período de tiempo para que los grupos participen en pensamientos divergentes. Indíqueles que eliminen la mayoría de las ideas, dejando unas cuantas para que elija el primer grupo. Al final del segundo período, vuelva a colocar los trabajos en los grupos originales.

Si ambos grupos aún no han llegado a un consenso sobre la idea de seguir adelante, indique a cada grupo que elija uno de las ideas que les quedan para poner sobre la mesa. Una vez elegida, ambos grupos presentarán esa idea y la decisión se someterá a votación entre ambos grupos.

Elija a los mejores miembros de su equipo para cada trabajo

Si tiene un equipo fuerte que respeta los procesos de cada uno, es posible que desee dividir su equipo según sus fortalezas y permitir que algunos se concentren en el pensamiento convergente o divergente. Algunos miembros del equipo se inclinan naturalmente hacia uno u otro. Permitir que las personas muestren sus fortalezas puede brindarle a su equipo la mejor respuesta en un proceso que todos disfrutan.

¿Cómo saber qué miembros del equipo son más hábiles en el pensamiento convergente o divergente? Hay algunas formas de averiguarlo.

Tener un diálogo abierto

Ofrezca a los miembros de su equipo la oportunidad de elegir en qué tipo de pensamiento les gustaría participar (si tienen que elegir). Conozca sus formas preferidas de lluvia de ideas. Es posible que descubra que su equipo prefiere naturalmente un tipo de pensamiento sobre el otro. ¡También descubrirás que les gusta intercambiar ideas de diferentes maneras! Manten una mente abierta.

Pruébelo algunas veces

Si todos se encogen de hombros, realice algunas pruebas. Divida los equipos al azar o reúna a todos para intercambiar ideas. Divida claramente su tiempo entre el pensamiento convergente y el divergente. Descubrirá que algunos miembros del equipo tienen dificultades con el pensamiento convergente, u otros no logran hablar una vez que el pensamiento convergente termina. A medida que observe estos patrones, tendrá una mejor idea de qué «grupo» prefiere un estilo sobre el otro.

Ir por Myers Briggs

¿Todo su equipo conoce su tipo de Myers Briggs? Utilice esto para indicar qué miembros probablemente estén más inclinados a participar en el pensamiento convergente o divergente. Los miembros del equipo más adecuados para el pensamiento convergente incluyen:

Estos no son los únicos miembros del equipo que deberían participar en el pensamiento convergente, pero le da una buena idea de quién podría querer en la sala durante esta parte de lluvia de ideas.

Los mejores pensadores divergentes incluyen:

  • ENFP
  • ENTP
  • INFP
  • INTP
  • ESTJ
  • ESFJ
  • ISFJ
  • ISTJ

Esto no está escrito en piedra. Confía en los miembros de tu equipo. Si prefieren un estilo sobre otro, ¡dales la oportunidad de brillar!

Otras ideas para la lluvia de ideas

Conocer las diferencias entre el pensamiento convergente y el divergente puede ayudarle a realizar una lluvia de ideas. Sin embargo, este enfoque puede no ser el mejor proceso para todos los equipos. A continuación se muestran otras formas de generar nuevas ideas y encontrar soluciones a sus problemas más urgentes.

Guión gráfico

Reúna a su equipo y trate su problema como un conflicto en un libro. Cree un «guión gráfico» que explique qué condujo al problema y al conflicto en cuestión. (¡Los post-it y los marcadores borrables son excelentes herramientas para este tipo de lluvia de ideas!) Este método le brinda a su equipo una nueva forma de ver su problema.

CORRETEAR

SCAMPER ofrece un excelente conjunto de indicaciones para conversar sobre soluciones. Esta es una excelente forma de lluvia de ideas para equipos que generalmente no son pensadores convergentes.

SCAMPER significa:

  • Sustituto: ¿Qué pasaría con el proyecto si cambiamos X por Y?
  • Combinar: ¿Qué pasaría con el proyecto si combináramos X e Y?
  • Adaptar: ¿Qué cambios habría que hacer para adaptar este proyecto a un contexto diferente?
  • Modificar: ¿Qué podríamos modificar para crear más valor en este proyecto?
  • Darle otro uso: ¿Qué otros usos o aplicaciones podría tener este proyecto?
  • Eliminar: ¿Qué podríamos eliminar del proyecto para simplificarlo?
  • Contrarrestar: ¿Cómo podríamos reorganizar este proyecto para hacerlo más efectivo?

Seis sombreros para pensar

En 1985, el psicólogo Edward de Bono escribió «Seis sombreros para pensar» sobre un ejercicio de resolución de problemas que implicaba un juego de roles. Describió seis «sombreros» diferentes que una persona podría usar mientras intercambiaba ideas nuevas:

  • Lógica: Hechos
  • Optimismo: Valor y beneficios.
  • Abogado del diablo: Dificultades y peligros
  • Emoción: Sentimientos e intuiciones
  • Creatividad: Posibilidades y nuevas ideas
  • Gestión: Gerente de otros «sombreros»

¿Qué pasaría si eligieras a seis personas de tu equipo para que usaran estos «sombreros»? ¿Pensarían en una solución de una manera nueva? ¿Se les ocurrirían grandes y nuevas ideas? ¡Solo hay una manera de descubrirlo!

Hay muchas maneras excelentes de generar nuevas ideas. Pruebe algunos métodos diferentes, tenga en cuenta el pensamiento convergente y divergente y disfrute resolviendo los mayores problemas de su equipo.