El cobre es un metal antiguo e intuitivo. Se ha utilizado durante siglos para todo, desde aliviar el dolor hasta neutralizar la energía negativa y activar ciertos chakras. Con su brillo rojo y dorado, trae la energía conmovedora del sol, la sabiduría profunda de la tierra y el destello de fuego que nos ayuda a elevarnos en nuestra fuerza. Brillando en su estrecho contacto con la piel, el cobre llama a nuestras energías estabilizadoras y nos ayuda a equilibrar las emociones y activa nuestras vías neuronales.
Incluso cuando se trata de lo físico, el cobre puede ayudar de mil maneras diferentes. Se sabe que es un calmante natural de todas las cosas inflamatorias y también rebosa de propiedades antibacterianas. Todos sabemos que la curación va más allá de la piel y estos aretes de alambre de cobre no pierden el ritmo. Trabajando para limpiar y equilibrar su chakra sacro, el cobre ilumina su espíritu guerrero y aprovecha su más profundo sentido del deseo. Al usarlos como aretes de alambre, también animas a tu tercer ojo a mantenerse limpio y despejado también.
Los pendientes de cobre iluminan nuestra vida de mil maneras. Al estar colocado cerca de la frente y el tercer ojo, significa que llevas el aura energética del cobre dondequiera que vayas. Como también se cree que el cobre es un refuerzo para el cerebro, también puede agudizar su intuición y mantener a raya los pensamientos tóxicos. Brilla intensamente y mantente astral con estos diseños de envoltura de alambre de cobre.