El chakra del corazón es el centro de todo. Es cómo nos conectamos con quienes nos rodean, cómo aprendemos a amarnos a nosotros mismos y cómo nos mantenemos equilibrados y siempre listos para recibir las abundantes maravillas que el mundo tiene para ofrecer. Cuando el chakra del corazón está cerrado o bloqueado, puede sentirse estancado y frío, puede luchar con los celos o dejar pasar las cosas, su confianza podría estar al borde de un cuchillo. En resumen, no te estás abriendo para dar o recibir compasión incondicional.
Aventurina verde es una piedra conocida por su paso ligero y rápido a la hora de calmar el chakra del corazón. Conectada fácilmente con el corazón, esta pálida piedra primaveral entreteje los hilos de la empatía y la compasión al mismo tiempo que asegura que mantengas tu fuerza para que no tengas que preocuparte por ser un felpudo. Despídete de la ira y de todo lo irritante con esta piedra suave y juguetona.
Malaquita es mágico cuando se trata de curar el corazón. Con sus patrones arremolinados de color verde, usar Malachite como parte de su pulsera tiene el mismo efecto en su alma que una larga caminata en la naturaleza. Aporta una profunda sensación de paz y te da mucho tiempo para ordenar tus pensamientos sin forzar.
Cuarzo rosa es la reina del chakra del corazón. Con sus tonos rosa ruborizados y su lado romántico soñador, esta piedra preciosa es conocida por limpiar viejos traumas e invitarte a amar plenamente y sin miedo.
Rodocrosita es otra piedra rosa, a veces llamada Raspberry Spar gracias a su toque de color rosa, estimula tu sentido de valor y asegura que estás listo para comprometerte contigo mismo primero y hacer esa sanación celestial del corazón.