Mientras buscas las formas más sabias de responder a un narcisista, es necesario reconocer su punto de partida. Especialmente cuando hay conflicto, la mentalidad predeterminada del narcisista es: “Lo sé, tú no lo sabes. Estoy iluminado, eres un tonto”. Esta forma de pensar, por supuesto, da lugar a críticas y acusaciones crónicas. Y para empeorar las cosas, la verdad es… bueno, conveniente. Pueden culpar y acusar incluso cuando los hechos no coinciden.
¿Con qué frecuencia has escuchado comentarios como:
- Eres igual que tu madre.
- No puedes hacer nada bien.
- No tendríamos nuestros problemas si no fuera porque eres tan imposible.
- No sé por qué alguien querría escucharte.
- Ayer dijiste una cosa, hoy es otra. ¿Lo que da?
- Eres la persona más discutidora que conozco.
- No, no puedes hacerlo de esa manera. No puedo contar contigo.
Etcétera.
Los narcisistas están en una postura defensiva constante, y una de sus tácticas favoritas es mantener la atención fuera de sus defectos poniéndolos en ti. La “verdad” se convierte en lo que se adapte a su narrativa en el momento. Al tener derecho, los narcisistas no pueden ser objetivo desde subjetividad impulsa sus actitudes. Además, eligen no recordar sus propios errores o deficiencias debido a su vergüenza oculta. En cambio, se encargan de explicarle sus motivos como si tuvieran la mejor idea. Y aunque son ellos los que perpetúan la tensión, se convencen de que son la víctima cuando no respondes como desean.
Es importante comprender que cuando los narcisistas te critican y te señalan con el dedo acusador, están expresando su propia inestabilidad y dolor internos. Al ser aversivos a la autorreflexión vulnerable, descargan ese dolor sobre ti.
Mientras tanto, a medida que experimentes la patología que impulsa las acusaciones del narcisista, te desgastará psicológicamente. Es fácil ponerse reflexivamente a la defensiva cuando te acusan, y puedes albergar pensamientos de incredulidad como «No puedo creer que tenga que aguantar estas tonterías». Asimismo, puedes responder con ira, lo que te deja vulnerable a participar en discusiones circulares. Con el tiempo, puedes luchar contra sentimientos de resentimiento y desprecio. A menudo puedes apaciguar al narcisista o quizás aislarlo.
Con el tiempo, tus sentimientos de cansancio pueden llevarte a decir: “¡Ya basta! Puedo hacerlo mejor; Necesito responder mejor”. Una vez entendido esto, centrémonos en los múltiples pasos que pueden provocar una respuesta racional al narcisista acusador irracional. Comienza con poner tu cabeza en el lugar correcto.
- Recuerde que cada vez que responde con agitación, le hace el juego al narcisista.. Piensan de manera adversa, como lo demuestran sus esfuerzos por abrumarlo y azotarlo verbalmente para que se someta. No es alguien que deba marcar tu ritmo emocional. Recuerde que está en presencia de una persona perturbada, no de un líder o un modelo positivo.
- Conéctate a la realidad, incluso cuando sea fea.. Es un hecho (un hecho triste) que los narcisistas necesitan que te sientas inferior para desarrollar su tipo de autoestima. Los narcisistas constantemente compensan a su costa su propia incompetencia psicológica.
- no defender. Podrías explicarte una vez, pero no más. Sus esfuerzos por racionalizar y justificar fracasarán cada vez. Inevitablemente, su defensa generará más comentarios ofensivos.
- Determina por separado tus rasgos definitorios. Lejos del caos, tómate el tiempo para escribir entre 12 y 15 características principales que quieras priorizar. Sea específico sobre lo que significa convertirse en una persona sana.
- Identifica de antemano 5 o 6 de los episodios más comunes con el narcisista que te desencadenan. Luego, tomando la lista de características principales, ensaye mentalmente cómo podría utilizar esos rasgos en tales escenarios.
- Comprométete a ser una persona tranquila y confiada.. El narcisista quiere que estés desquiciado, pero no llegues a eso. Con paciencia, recuerde que tendrá que ser la persona sana en la sala. Confía en ti mismo y mantén la creencia de que tu valor permanece intacto a pesar de la propensión del narcisista a acusar.
- Avanzar con decisión asertiva. No necesitas el permiso del narcisista para seguir adelante con tus prioridades, ni necesitas su acuerdo mientras te aferras firmemente a tus opiniones y preferencias. Ponga en práctica los límites de su relación actuando según sus mejores criterios.
Recuerde, cuando los narcisistas descargan sobre usted una acusación tras otra, no se trata de una persona sana. Además, esta no es una persona que quiera hacer introspección… lo que explica la tendencia a mirar hacia ti. Además, tenga en cuenta que las acusaciones de un narcisista suelen ser una proyección de sus propios problemas internos inconclusos. Y tenga en cuenta que esperar que el narcisista cambie no es una buena estrategia. Quizás nunca logres cambiar a esa persona, pero puedes cambiar la forma en que respondes.
Recuerde: «Ser yo es bastante adecuado». Y cuando el narcisista acusador declare lo contrario, recuérdese: «Sin embargo, ser yo sigue siendo bastante adecuado».
~Les Carter, Ph.D.
Si desea ver la versión en video de este artículo, haga clic aquí.