Halloween puede ser una época del año divertida y emocionante para muchos niños. Puede ser una época de fiestas y dulces. Sin embargo, las transiciones entre diversas actividades y los cambios repentinos en las rutinas diarias pueden resultar particularmente perturbadores para algunos niños con autismo. Sin embargo, los padres pueden ayudar a aliviar algunas de estas tensiones utilizando Halloween como una “herramienta de enseñanza” para sus hijos con autismo.
1. Truco o trato y otras actividades
«¿Truco o trato?» es una frase común que repiten los niños cuando tocan a la puerta de una persona la noche de Halloween. Un padre puede practicar esta habilidad con su hijo en casa para que esté consciente de este “saludo tradicional” cuando llama a la puerta de alguien. Algunos niños con autismo interpretan ciertas frases como “blancas o negras”. Es posible que le pregunten por qué necesitan realizar un “truco” a alguien que no conocen. Es posible que quieran saber qué “trucos” son aceptables o incluso participar en un comportamiento social que consideran aceptable como un “truco” cuando otros pueden verlo como “inaceptable”.
Haga clic aquí para saber más
No es necesario explicarle los “trucos” y discutir esto con su hijo puede ahorrarle a él y a usted cierta vergüenza en el vecindario. Algunos niños con autismo pueden no tener ningún interés en ir a pedir dulces por la noche. Es posible que les guste quedarse en casa y repartir dulces. Esta es otra excelente oportunidad para que practiquen sus habilidades sociales con los niños en la puerta de su casa mientras interactúan con ellos.
2. Autodefensa
La autodefensa es una habilidad importante para la vida que cualquier individuo puede obtener. Se puede pedir a los niños que seleccionen un caramelo de un cuenco en la casa de un vecino. Un niño con autismo puede mirar dentro del cuenco y no ver el caramelo que desea. Es posible que él/ella no sepa cómo responder. Es posible que se le siga pidiendo que seleccione y que no sepa cómo responder y simplemente se vaya. Puede parecer un comportamiento grosero para los demás. Es posible que a los niños con autismo se les deba enseñar a decir “No, gracias”.
Es posible que algunos niños con autismo no quieran seleccionar un caramelo si sienten que otras personas lo han tocado dentro de un tazón. Es posible que otros vecinos simplemente coloquen dulces en la bolsa del niño y, nuevamente, es posible que sea necesario enseñar al niño con autismo a decir «gracias». Algunos niños con autismo pueden sentirse confundidos en cuanto a por qué agradecen a alguien por un caramelo que no les gusta. Practicar situaciones de habilidades sociales con ellos puede ayudarlos a comprender que pueden darle ese dulce a un amigo o cambiarlo por el dulce preferido de un miembro de la familia.
3. Resolución de problemas con otros niños
A algunos niños con autismo no les gustan las multitudes ni que otros niños choquen con ellos al hacer contacto físico. Cuando van a entrar por una puerta en la noche de Halloween, es posible que varios niños corran hacia la puerta al mismo tiempo. Tener las habilidades sociales para decir cosas como: “Disculpe” o “Es su turno, puedo esperar” puede hacer que la velada sea mucho más agradable. Algunos niños viajan en grupos la noche de Halloween. Algunos niños se mueven más rápido que
otros. Tener las habilidades sociales para pedirles a los demás que «reduzcan la velocidad y esperen» puede ayudarlos a tener una velada más productiva.
4. Historias sociales
Las historias sociales son una excelente manera de desarrollar habilidades sociales apropiadas para niños con autismo. Permitirá a los padres y a sus hijos la oportunidad de practicar estas habilidades diariamente durante el mes de octubre. Luego, las mismas habilidades sociales que se han enseñado y obtenido se pueden generalizar en los próximos días festivos como Acción de Gracias, Navidad o Hanukkah.
Preparándose para la historia social de Halloween
¡Halloween pronto llegará! Sucede el 31 de octubre.
Para Halloween, me vestiré con el disfraz que elija.
Si mi disfraz me incomoda, puedo usar mi ropa encima.
A veces, en Halloween, puede nevar o llover. Quizás tenga que usar mi chaqueta o traer un paraguas.
Cuando voy a pedir dulces, llevo una linterna conmigo.
Quizás vea cosas aterradoras en la noche de Halloween. Siempre puedo tomarme un descanso si me siento demasiado asustado.
Si una casa no tiene encendida la luz del porche, NO tocaré a su puerta. Si la luz del porche está encendida, llamaré.
Si voy a una casa y hay muchos otros niños conmigo, es posible que tenga que hacer cola.
Cuando llego a la casa, toco la puerta o toco el timbre una vez y luego digo «¡Truco o trato!».
Algunas casas pueden tener personas que me dejen elegir mis propios dulces. Si no veo nada que me guste, puedo simplemente decir: «No, gracias».
Algunas casas pueden tener personas que simplemente me ponen dulces en el bolso. Si compro dulces que no me gustan, se los puedo dar a mi hermano o hermana o llevárselos a la escuela para un amigo.
Nunca entro a la casa de alguien a buscar mis dulces. Me quedo afuera y espero.
Cuando recibo mis dulces, no puedo comerlos hasta llegar a casa. Mis padres tendrán que revisar mis dulces primero para asegurarse de que sean seguros.
5. Tallar una calabaza
Los niños disfrutan tallando calabazas para Halloween. Estas actividades se pueden utilizar para desarrollar las habilidades sociales para pedir un marcador, cómo obtener ayuda para recortar la cara, cómo turnarse apropiadamente, cómo limpiar el desorden, etc. También se puede desarrollar un análisis de tareas para un estudiante a seguir para intentar completar de forma independiente una actividad de calabaza tallada y también saber cómo pedir ayuda de manera adecuada cuando sea necesario.
Análisis de tareas para tallar tu calabaza
Paso 1: Pregúntale a mamá y papá si puedes tallar una calabaza.
Paso 2: Ve a la tienda o al huerto de calabazas y llévate una calabaza a casa.
Paso 3: Consigue un poco de periódico para esparcirlo debajo de la calabaza.
Etapa 4: Haz que mamá y papá te ayuden a cortar la parte superior de la calabaza.
Paso 5: Saca todas las semillas de calabaza y colócalas en una bolsa de papel.
Paso 6: Dibuja una cara en la calabaza.
Paso 7: Haz que mamá y papá te ayuden a tallar una cara en la calabaza.
Paso 8: Coloca una vela o linterna dentro de la calabaza. Haga que mamá y papá enciendan la vela si usan una.
Paso 9: Vuelve a colocar la parte superior de tu calabaza.
Paso 10: Tira los periódicos y la bolsa de papel.
6. Usar un disfraz para ir a la escuela y otras actividades
Usar un disfraz para la noche de Halloween o para la fiesta de Halloween de la escuela es una tradición anual. Será importante que los niños con autismo discutan, seleccionen y reciban su disfraz con anticipación. Algunos niños con autismo tienen necesidades sensoriales específicas. Es posible que no les guste tener una máscara en la cara o usar maquillaje. Si la regla de la escuela es que no pueden usar el disfraz en la escuela o no pueden tener accesorios como varitas, espadas o pistolas, será necesario explicar todo esto.
También es un buen momento para practicar el lenguaje de habilidades sociales sobre por qué el niño seleccionó este tipo de disfraz, si el personaje es uno de sus favoritos, etc. Actividades como mover manzanas en busca de manzanas también pueden parecer poco atractivas. A los niños con autismo puede no gustarles la idea de mojarse la cara o ensuciarse el disfraz.
7. Planificación anticipada de los cambios de rutina
Las transiciones de una actividad a otra a menudo pueden resultar difíciles para los niños con autismo. Planificar con anticipación puede ayudar a evitar crisis por cambios en las actividades. El clima puede interrumpir la noche y es posible que sea necesario hacer planes alternativos de inmediato. Algunos niños con autismo pueden optar por quedarse en casa por la noche y repartir dulces. El sonido constante del timbre durante períodos prolongados durante la noche también puede resultarles molesto si son sensibles al ruido.
8. Historias y películas relacionadas con Halloween
A muchos niños durante el mes de octubre les encanta leer un buen cuento de Halloween o ver una película relacionada con Halloween. A otros niños con autismo puede que no les guste la literatura o las películas de terror. Sin embargo, para aquellos niños con autismo que disfrutan de estas actividades, puede abrir oportunidades sociales para interactuar con sus compañeros. Tener la oportunidad de interactuar con sus compañeros sobre un libro o una película recién publicados puede permitirles practicar sus habilidades sociales y el lenguaje que los rodea.
9. Comprender la importancia de controlar los dulces
Los padres deberán explicar a sus hijos las razones por las que no comen los dulces que les dieron durante la noche mientras piden dulces. Algunos niños con autismo pueden experimentar un colapso cuando se les dice que no pueden comer sus dulces inmediatamente después de recibirlos. Si esta habilidad se practica de antemano, puede ayudar en este tipo de situaciones. Además, los niños con autismo también necesitarán saber que todos los dulces deberán llevarse a casa y revisarse antes de poder consumirlos.
10. Celebrando las habilidades sociales
Muchas personas se centran en enseñar a los niños con autismo habilidades sociales apropiadas durante todo el año escolar. Los padres y profesionales ayudan a los estudiantes autistas a concentrarse en la expresión facial y el lenguaje corporal. Víspera de Todos los Santos
ofrece otra oportunidad para ampliar estas habilidades sociales. Los estudiantes con autismo deben poder leer las señales sociales que se producen cuando se apaga la luz del porche la noche de Halloween. Será necesario recordar a los estudiantes que esto significa que la persona no está en casa o no participa en Halloween.
Es posible que los padres también necesiten explicar con más detalle por qué algunas personas no celebran Halloween ni reparten dulces. Una de las habilidades sociales más importantes que deben practicar gira en torno a su propia seguridad durante la noche. Es necesario recordarles que nunca es apropiado entrar a la casa de una persona para obtener dulces. Necesitan que se les expliquen los riesgos de seguridad. Esta puede ser una excelente razón para que los padres asistan a actividades relacionadas con Halloween con sus hijos autistas para garantizar la seguridad de todos.
Este artículo apareció en Número 109 – Lograr una buena salud.