Enseñar a su hijo a ser asertivo: 10 consejos

Enseñar a su hijo a ser asertivo implica algunas estrategias simples, como practicar la escucha activa y ayudarlo a desarrollar la inteligencia emocional.

La asertividad es la capacidad de defenderse a sí mismo y expresarse respetando las creencias y los derechos de los demás. Es una cualidad beneficiosa que muchos padres quieren para sus hijos, aunque no siempre es algo natural para todos.

Algunos niños pueden no tener problema en mirar a los demás a los ojos y decir lo que piensan. Pueden sentirse cómodos ofreciendo una opinión diferente y saber cómo pedir lo que quieren.

Pero otros niños pueden ser más callados y más vacilantes. Es posible que eviten el desacuerdo por temor a una consecuencia negativa y es posible que no sepan cómo defenderse.

Si cree que su hijo podría beneficiarse de una mayor comunicación asertiva, hay formas en que puede ayudar a los niños a desarrollar habilidades de asertividad.

La asertividad es una habilidad que su hijo puede aprender. Construir confianza es parte de aprender a ser más asertivo.

Algunos niños se desarrollan rápidamente en esta área y otros pueden necesitar más tiempo. De cualquier manera, hay cosas que puede hacer para ayudar.

Considere estas 10 estrategias para enseñarle a su hijo a ser asertivo.

1. Construir inteligencia emocional

Los sentimientos son una parte natural del ser humano. Enseñar a su hijo a reconocer y etiquetar sus emociones puede hacer que se sienta más en control. Esto puede generar confianza, lo que ayuda a impulsar la inteligencia emocional y la asertividad.

Un pequeño estudio de 2019 sugirió que la crianza consciente puede aumentar la regulación emocional en los niños. La crianza consciente es el acto de estar completamente presente en los momentos que pasas con tu hijo.

2. Practica la escucha activa

La escucha activa significa prestar toda su atención a su hijo y notar todo lo que pueda sobre lo que está tratando de comunicar. La escucha activa es parte de la crianza consciente y puede mostrarle a su hijo cómo ser más asertivo.

Un niño confiado puede ser aquel que cree que su opinión cuenta. Esto no significa que siempre se salgan con la suya. Sin embargo, la escucha activa les muestra que incluso si la respuesta es «no», su opinión sigue siendo importante.

3. Actúe según la opinión de su hijo

A veces su hijo pide algo apropiado y entregable. Pero, ¿y si quieren que las paredes de su dormitorio estén pintadas de amarillo cuando crees que el verde sería una gran opción?

Es posible que este cambio no se alinee con sus planes de diseño, pero puede contribuir a las habilidades de asertividad de su hijo al crear una experiencia positiva relacionada con su autodefensa.

4. Pregunta en lugar de decir

Muchos niños disfrutan de un paseo por la tarde al parque, pero es posible que el tuyo no. Decirle a su hijo que el parque es divertido elimina la posibilidad de que haga valer su propia opinión.

Si les pregunta cómo se sienten y trata su respuesta con respeto, pueden adquirir la confianza necesaria para compartir su opinión.

5. Modele la asertividad

Los niños aprenden copiando, lo que significa que modelar el comportamiento puede ser una herramienta de enseñanza eficaz para los padres, especialmente si se pregunta cómo enseñarle a su hijo a valerse por sí mismo.

Las formas de modelar la asertividad para su hijo incluyen:

  • hablando de tus sentimientos y opiniones
  • manteniendo la calma
  • usando declaraciones en primera persona
  • creando límites
  • autodefensa

6. Cultiva la confianza

La confianza no se trata solo de sentirse capaz. También se trata de sentirse empoderado incluso con las imperfecciones humanas.

Las personas seguras de sí mismas a menudo usan sus fortalezas y también tienden a perseverar si no tienen éxito la primera vez.

Puede mostrarle a su hijo que está bien fallar y volver a intentarlo. Deja que te vean:

7. Fomenta las actividades extraescolares

El juego no estructurado y el tiempo tranquilo en familia son importantes, pero las actividades extracurriculares ofrecen una oportunidad para que su hijo practique la asertividad.

Los deportes de equipo y las artes escénicas son dos ejemplos de actividades que a menudo requieren una interacción segura entre compañeros.

8. Practica la aceptación

Un estudio de 2018 relacionó el rechazo de los padres con la ansiedad. Las puntuaciones de ansiedad disminuyeron a medida que aumentaba la calidez y el afecto de los padres.

La aceptación de los padres y sus efectos reductores de la ansiedad también pueden contribuir a aumentar la asertividad, la confianza y la autoestima en los niños.

9. Enseñar conductas asertivas

A veces, la forma más fácil de enseñar un conjunto de habilidades es enfocarse en comportamientos individuales. A menudo son específicos y más fáciles de entender.

Los comportamientos de asertividad incluyen:

  • iniciar o finalizar conversaciones
  • haciendo peticiones
  • diciendo «no»
  • hablando de sus sentimientos
  • manteniéndose firme

Trate de elegir un comportamiento para comenzar, o espere las oportunidades del momento de enseñanza y aplique las respuestas apropiadas.

10. Delegar algunas decisiones

Los niños asertivos a menudo pueden sentirse cómodos al tomar decisiones. Si el tuyo necesita algo de estímulo en esta área, comienza poco a poco, como elegir entre dos camisas para usar en la escuela.

Puede ser incómodo ver a su hijo cometer errores al tomar decisiones, pero esta es una poderosa oportunidad de aprendizaje. Los errores enseñan mejores habilidades para tomar decisiones, y esa adversidad es algo que pueden superar.

La asertividad puede beneficiar a los niños de muchas maneras, como permitirles:

  • abogar por sí mismos
  • ayuda a otros
  • evitar el acoso y la presión de grupo
  • identificar sus sentimientos
  • establecer límites y fronteras
  • sentir una sensación de control
  • negociar y discrepar respetuosamente

Un pequeño estudio de 2020 que involucró a estudiantes de séptimo grado ilustró los beneficios del entrenamiento en asertividad para los niños. Los investigadores descubrieron que la capacitación, y específicamente el aprendizaje de la práctica de decir “no”, ayudó a aumentar la confianza en sí mismos y la asertividad en los participantes adolescentes.

El entrenamiento en asertividad puede reducir la ansiedad en los niños con problemas de aprendizaje. Los hallazgos de un pequeño estudio de 2015 que involucró a estudiantes de escuela primaria sugirieron que los niños con discapacidades de aprendizaje pueden tener menos habilidades de asertividad que sus compañeros neurotípicos.

El entrenamiento en asertividad puede incluso ayudar a prevenir la depresión en adolescentes, según un pequeño estudio de 2018.