Una búsqueda rápida en Internet probablemente revelaría millones de artículos y recursos sobre cómo encontrar y mantener una relación sana. El consejo puede ser invaluable para quienes luchan con los límites, la comunicación y el fomento de una verdadera intimidad en las relaciones. Entonces, básicamente todos nosotros.
Pero la realidad es que muchas de las cosas que dañan y destruyen nuestras relaciones son comportamientos cotidianos en los que no pensamos dos veces. Cuando no sabemos que lo que estamos haciendo es perjudicial, a menudo nos sorprendemos cuando las relaciones se rompen o explotan. A veces, son todas las pequeñas cosas y, como sabemos de la vida, las pequeñas cosas suelen ser las que más importan.
He tenido la suerte de encontrarme en una relación sana durante el último año. No ha sido mi experiencia antes. O, al menos, en el pasado, algunos parecían estar sanos al principio y luego rápidamente se deterioraban hasta convertirse en tóxicos. Si bien no asumiré toda la responsabilidad allí, sí sé que navegar por una relación sana requiere un conjunto de habilidades completamente diferente al que me he acostumbrado.
Como aprecio a mi pareja y la relación que tenemos, muchas veces evalúo mi propia forma de estar en ella. Intento asegurarme de nutrir lo que tenemos y no ignorarlo de ninguna de las siguientes maneras.
Dicho esto, estoy lejos de ser perfecto. La práctica hace progresos y sigo trabajando en ello. Pero estoy tratando de no tener estos comportamientos que destruyen las relaciones.
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