Cómo transformar creencias limitadas en posibilidades ilimitadas

Es posible que hayas escuchado la historia de dos lobos. A menudo se usa para ilustrar el conflicto interno entre el bien y el mal. Pero también es una poderosa historia sobre las creencias limitantes.

Un día, un abuelo comparte una sabiduría eterna con su pequeño nieto.

Él dice: “En la vida, hay dos lobos dentro de nosotros, siempre en batalla. Un lobo es amor, bondad, valentía y empatía. El otro es el miedo, la codicia y el cinismo. La misma lucha está ocurriendo dentro de ti y de todas las demás personas también”.

El niño reflexiona sobre lo que ha dicho su abuelo y luego pregunta: “Pero abuelo, ¿cuál lobo gana?”.

El abuelo responde: “Cualquiera que alimentes”.

Examinando tu propio espacio mental, ¿a qué lobo alimentas a diario?

¿Estás viviendo tu vida desde un lugar de coraje e inspiración, o estás atrapado por la negatividad y la duda?

Si es esto último, tus creencias limitantes están ganando. Ha estado comiendo bien durante mucho tiempo, lo que le impide orientarse hacia el propósito, la realización y la confianza.

La buena noticia es que puede cambiar esto aprendiendo a alimentar a los otro lobo.

¿Qué son las creencias limitantes?

Todos tenemos creencias; son las cosas que aceptamos como verdaderas pero no podemos probar. Algunas creencias son beneficiosas; nos dan confianza en nosotros mismos y nos animan a seguir adelante.

Las creencias limitantes nos detienen

Las creencias limitantes pueden afectar gravemente nuestra autoestima. Son narraciones que nos decimos a nosotros mismos sobre nuestras capacidades y el mundo que nos rodea que nos impiden vivir la vida que realmente deseamos.

Estas creencias son la esencia del lobo temeroso: pensamientos mezclados con dudas, cinismo y negatividad que estrechan nuestras mentes, nos mantienen en nuestras zonas de confort y nos impiden liberar nuestro potencial.

A menudo, las creencias limitantes son subconscientes y están arraigadas, lo que las hace difíciles de identificar y aún más difíciles de desarraigar. Pero la buena noticia es que puedes superarlos con práctica, corazón y algunas herramientas prácticas que compartiré contigo hoy.

El linaje de las creencias limitantes

En su revolucionario libro The Biology of Belief, Bruce Lipton afirma que “el 95 % de nuestras creencias y, por lo tanto, los comportamientos están integrados en nuestro subconsciente a los siete años”.

En este momento, ya hemos construido una red mental de creencias que permanecerán con nosotros durante toda nuestra vida, a menos que intentemos modificarlas de manera proactiva.

Tú puedes pensar: “¡Ni siquiera recuerdo tener cinco o seis años, así que no sé cómo pude reunir creencias limitadas para entonces!”

Bueno, resulta que nuestras jóvenes mentes subconscientes son como dispositivos de grabación con el botón «grabar» constantemente encendido. Al igual que una esponja, habríamos estado absorbiendo constantemente todos los datos del mundo que nos rodea: cosas que nos dijeron, escucharon y vieron.

Sin embargo, dada nuestra corta edad, no habríamos practicado el pensamiento crítico ni formulado nuestras creencias en base a estas experiencias. En cambio, dejaron huellas directas en nuestra psique, dejando percepciones y percepciones erróneas sobre el mundo que nos rodea que probablemente todavía creemos hoy.

Ya sea que haya tenido una infancia maravillosa o desafiante, creo que la mayoría de nosotros tenemos creencias autolimitantes que debemos reemplazar por otras que nos empoderan. Después de todo, la mente joven es muy maleable: solo una experiencia negativa podría dejar heridas que durarían toda la vida.

¿El primer paso para recalibrar el sistema de creencias de tu mente? Descubrir dónde se encuentran tus creencias limitantes.

Cómo identificar las creencias limitantes

Imagina que tu mente es un jardín

Las creencias empoderadoras son flores que te ayudan a florecer y crecer. Las creencias limitantes son malas hierbas dañinas, roban el alimento mental y siembran negatividad.

El desafío es averiguar cuáles de tus patrones de pensamiento son flores y cuáles son malas hierbas.

Quizás ya tengas una idea de algunas de tus creencias limitadas, o quizás estés comenzando desde cero. Con los siguientes consejos, comenzará a notar las malas hierbas que aparecen en su mente una y otra vez.

1. Mantenga un diario

Nuestros pensamientos y emociones a menudo van de la mano. Cuando te sientes triste, enojado o asustado, tu mente probablemente te está alimentando una narrativa que alimenta tus sentimientos.

Descifrar la relación entre tu estado de ánimo y tus pensamientos es una excelente manera de descubrir creencias limitantes. Al final de cada día, observa cómo te sientes en un diario y trata de descubrir los pensamientos que coincidieron con este sentimiento.

Cuanto más frecuentemente escriba en su diario, más oportunidades tendrá de notar los bucles de pensamientos negativos recurrentes en su experiencia.

2. Revisa tus esperanzas y sueños

Si pudieras hacer cualquier cosa, sin miedo al juicio, al fracaso o a las preocupaciones por el dinero, ¿qué harías?

Siguiente: ¿por qué no intentas hacerlo ya? Responda eso y descubrirá algunas de las creencias limitadas arraigadas que lo están frenando.

Otra forma de probar este ejercicio es el método de llenar los espacios en blanco.

Piensa en una aspiración que hayas dejado de lado o en un proyecto con el que estés luchando actualmente. Luego, complete el espacio en blanco al final de la oración.

Aquí hay un ejemplo:

No puedo obtener la promoción que quiero porque _________________.

Di la oración en voz alta y resiste la tentación de ser autocrítico. Cualquier cosa con la que llene el espacio en blanco indica una de sus creencias limitantes.

3. Considere los acuerdos que ha roto consigo mismo

En algún momento u otro, todos nos hemos desviado de nuestros objetivos. Muchas personas, por ejemplo, se inscriben en el gimnasio a principios de año, solo para cancelar sus membresías en febrero.

Piensa en los acuerdos que has hecho contigo mismo y que no has podido cumplir a lo largo de los años. Podría ser comenzar un ajetreo secundario, mejorar su estado físico o leer más.

Una vez que haya perfeccionado algunas de estas resoluciones desviadas, pregúntese por qué se dio por vencido.

Sea honesto, crudo y vulnerable: la respuesta apuntará directamente a una creencia autolimitante.

4. Habla con un profesional

Si, después de estos ejercicios, tiene dificultades para identificar sus creencias limitantes o se siente abrumado por ellas, buscar el apoyo de un profesional capacitado, como un terapeuta o un entrenador de vida, es una gran idea.

Estos practicantes empáticos se basan en una variedad de técnicas y ejercicios para ayudar a las personas a desenredar sus creencias limitantes, mejorar su autoestima y vivir vidas más gratificantes.

Ejemplos de algunas creencias limitantes poderosas

Echemos un vistazo a ejemplos comunes de algunas de las creencias autolimitantes más poderosas y también más dañinas.

Tenga en cuenta que esta no es una lista exclusiva. Si bien estas creencias son algunas de las más frecuentes, las convicciones limitantes vienen en todas las formas y tamaños.

1. No soy bueno/inteligente/creativo/lo suficientemente joven

Las creencias limitantes a menudo giran en torno al diálogo interno hiriente. Es posible que te impida perseguir tus sueños porque no crees que eres lo suficientemente bueno o te comparas autocríticamente con los demás.

Este tipo de diálogo interno es realmente dañino. Cuando te dices a ti mismo que no eres lo suficientemente bueno, bajas tu autoestima y niegas tus deseos innatos.

Si no se controla durante el tiempo suficiente, este pensamiento limitante puede hacer mella en su confianza en sí mismo y provocar una sensación profunda e incómoda de que falta algo.

2. No tengo tiempo

“El tiempo es una cosa creada. Decir ‘no tengo tiempo’ es como decir ‘no quiero’.

Lao Tse

Si ha estado posponiendo iniciar un negocio, escribir una novela o solicitar un nuevo puesto debido a la falta de tiempo, lo desafío a profundizar. Después de todo, la mayoría de nosotros tenemos tiempo.

Si consigues ver Netflix, ponerte al día con amigos los fines de semana y salir de vacaciones con regularidad, tienes tiempo, es solo que lo estás usando para otras cosas.

Las razones de esto pueden ser múltiples:

  • Miedo al fracaso
  • Sentirse cómodo con el statu quo
  • No querer exponerse

El punto es que rara vez el tiempo es el problema en estos casos. Son tus creencias limitantes las que te impiden avanzar.

3. Tengo miedo de cometer errores

Muchas personas que se sienten infelices en su situación actual nunca hacen un cambio porque temen fallar y cometer errores. Pero dejar que el miedo te detenga es uno de los mayores errores que puedes cometer.

Cuando no actuamos hacia nuestras metas y sueños, nos preparamos para una vida de insatisfacción.

Por supuesto, perseguir cualquier nueva oportunidad conducirá a errores en el camino. Pero los errores no son malos. Son lecciones: oportunidades para adquirir nuevas habilidades, aprender cosas nuevas y crecer como persona.

4. Estoy indefenso

La vida está inherentemente llena de altibajos. A menudo, lo que nos sucede está fuera de nuestro control, pero la forma en que respondemos está dentro de nuestra autonomía.

Sin embargo, algunas personas no asumen la responsabilidad de sus pensamientos y acciones. En lugar de tomar el control de su vida, se ven a sí mismos como víctimas. Culpan al mundo por sus problemas y, como resultado, se sienten impotentes.

Esta es una manera difícil de vivir. Al permitir que las circunstancias externas dicten tu felicidad, niegas tu propio poder y bloqueas tu potencial.

Para vivir una vida ruda, debes asumir una responsabilidad radical por tus pensamientos, comportamientos y acciones. Confía en mí, tienes mucho más valor y resistencia de lo que crees.

5. No me gusta el cambio

A mucha gente no le gusta el cambio. Nos sentimos cómodos en la familiaridad y seguridad de la rutina. Pero aquí está la cosa: vivir una vida extraordinaria requiere tomar riesgos.

Enamorarse, iniciar un negocio y perseguir nuestros sueños requieren que aceptemos el cambio y salgamos de nuestras zonas de confort.

Puede ser incómodo, pero eso no significa que el cambio sea malo. El cambio se siente difícil porque nos desafía a crecer y abrirnos a nuevas experiencias.

Si bien esto se siente intimidante, el resultado bien vale la pena. Cuando seguimos nuestros corazones y buscamos el cambio con curiosidad y una mente abierta, abrazamos la vida al máximo y desbloqueamos un sentido de propósito más profundo.

Cómo superar las creencias limitantes: convertirse en el autor de su sistema de creencias

Para alcanzar la autorrealización y vivir una vida significativa, debe hacerse cargo de su sistema de creencias y borrar las creencias limitantes defectuosas que ocupan su cabeza.

Por supuesto, sacudir las creencias que ha mantenido cerca desde la infancia requerirá trabajo, pero es completamente posible.

Martille nuestro su éxito

La neurociencia nos muestra que nuestros cerebros son altamente maleables a cualquier edad y que, de hecho, podemos reconfigurar nuestros patrones de pensamiento, reemplazando las creencias inútiles por otras más poderosas.

Aquí está cómo hacerlo.

1. Comprométete con la autoría propia

El Dr. Robert Kegan, ex psicólogo de Harvard, propuso que los adultos pueden pasar potencialmente por cinco etapas distintas de desarrollo, aunque muchos nunca superan la etapa tres.

La etapa cuatro es lo que Kegan llamó la mente autoautora: un estado del ser en el que separamos nuestra identidad y sistemas de creencias de las opiniones y expectativas de otras personas y la sociedad.

Puede cultivar una mentalidad de autor propio elaborando proactivamente sus valores e identidad.

Dedique algún tiempo a pensar en lo que realmente le importa, independientemente de las expectativas externas. Pregúntate a ti mismo las siguientes preguntas:

  • ¿Qué causa agitar tu corazón?
  • Quien quieres ser?
  • ¿Cuándo te sientes más como tu verdadero yo?

Responder estas preguntas lo ayudará a alinearse con su brújula interna única.

2. Elija una o dos creencias que ya no le sirvan

A partir del diario regular y la autorreflexión, habrás comenzado a descubrir algunas de las creencias limitantes que te impiden abrazar tu yo más auténtico y elevado.

Ahora, quiero que elijas una o dos de estas creencias para reconfigurarlas conscientemente. Comience poco a poco: fíjese cada vez que…