Cómo se descomponen los narcisistas cuando los confrontas

¿Es alguna vez la confrontación algo bueno? Bueno, digamos que es inevitable y necesario. Dado que la variedad está integrada en la experiencia humana, tendremos episodios en los que diferimos. A veces simplemente necesitamos educarnos unos a otros. A veces calculamos mal y necesitamos una recalibración. A veces es necesario abordar la insensibilidad. Y a veces necesitamos analizar el impacto de las decisiones personales.

En las relaciones sanas, reconocemos nuestras diferencias y damos lugar a las confrontaciones.

La comunicación limpia en esos momentos es vital para el crecimiento relacional y la coordinación. Cuando el objetivo es la armonía y cuando se gestiona con la asertividad adecuada, pueden resultar cosas buenas.

Desafortunadamente, los narcisistas cargan con una inmadurez generalizada, lo que significa que las confrontaciones con ellos pueden volverse desastrosas rápidamente.

Es en momentos de conflicto o tensión cuando se muestra el nivel de fuerza interior de una persona, y la fuerza interior no es el punto fuerte de un narcisista. Carecen de compostura psicológica, lo que hace que surja… con fuerza una actitud egoísta.

Cuando se enfrenta, el punto de partida de un narcisista es el establecimiento del poder. Definidos por el ensimismamiento y la falta de empatía, los narcisistas buscan el control. En sus mentes, ellos están iluminados, pero tú no. Necesitan que los entiendas, pero no te ofrecerán lo mismo a la inversa. Te corregirán, pero rechazarán cualquier atisbo de corrección. Tus palabras se volverán en tu contra, ya que es natural que los narcisistas piensen de manera competitiva.

Cuando te enfrentas a un narcisista, mostrará patrones predecibles. Por ejemplo:

  • Al levantar muros gruesos e impenetrables, se volverán irracionalmente defensivos.
  • Utilizarán tácticas de negación, justificación, revocación o burla.
  • Serás invalidado… repetidamente.
  • El narcisista puede ser propenso a la ira o a la ira intensa.
  • A menudo, se cerrarán de forma pasiva y agresiva.

Esto significa que es probable que seas testigo de cómo el narcisista se descompone justo delante de tus ojos. Son emocionalmente débiles, hasta el punto de la ineptitud. El ego es lamentablemente frágil. Al tener poca paz interior o confianza, no pueden ser objetivos. En cambio, buscan afirmación en el exterior, y cuando demuestras que eres incapaz de leer sus mentes o que no estás dispuesto a ceder a sus demandas, no irá bien. Y para colmo, interpretarán tu enfrentamiento como un rechazo, lo que sólo alimenta su irracionalidad.

Es difícil, casi imposible, que un narcisista piense de manera constructiva en esos momentos. No escuchará declaraciones como:

“Pensamos diferente. Hablemos.»

“No había considerado esa perspectiva. Consideraré detenidamente lo que estás diciendo”.

«Puedo decir que esto es importante para ti, así que soy todo oídos».

“A veces no soy tan ideal como me gustaría ser. ¡Me tienes!»

En momentos de confrontación, la apertura y la cooperación son ingredientes necesarios, pero los narcisistas han construido su imagen pública sobre un Falso Yo, lo que significa que no pueden tolerar la posibilidad de tener que quitarse la máscara.

En cambio, el narcisista recurrirá a discusiones y engaños. Su estrategia es confundirte, derribarte… todo con el fin de mantener la posición dominante que tan desesperadamente necesitan. Pero en el proceso, el narcisista de hecho transmitiendo: “Aún no he crecido. ¿Quieres ver cómo es un niño petulante? ¡Aquí viene!»

Cuando los narcisistas se descomponen en medio de confrontaciones, debes saber que estás tratando con alguien que quiere meterte en su caos. Instantáneamente asumen el papel de víctima (lo que les funciona) y luego utilizan la táctica de revertir la culpa.

Independientemente de cómo responda, recuerde que es en momentos como este cuando necesitará emplear su resolución interior. Pregúntese:

  • ¿Puedo permanecer fiel a mi propia madurez sin la comprensión, cooperación o validación de esa persona?
  • ¿Cuándo debo dejar de insistir en mi caso y simplemente actuar con asertividad?
  • ¿Qué estoy aprendiendo en medio de este conflicto… sobre el narcisista, sobre mí mismo?
  • ¿Cuál es mi punto de partida en esta relación? ¿Cómo debo ajustar mis expectativas? ¿Debería seguir siendo funcional? ¿Necesito trazar una línea dura? ¿Debería incorporar voces de refuerzo?
  • ¿Tengo que seguir exponiéndome a continuos insultos e invalidaciones? ¿Cuál es mi futuro con este individuo?

Descomponerse es lo que hacen los narcisistas.

Su base psicológica es tan frágil que no pueden controlar las tensiones y tensiones. No está en su composición. Siendo ese el caso, manténgase fiel a sus necesidades y convicciones y al mismo tiempo recuerde que su propia integridad está en juego. El narcisista lleva podredumbre interna, por lo que tu desafío es mantener la compostura.

~Les Carter, Ph.D.

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