Crea tu propio espacio sagrado personal mediante la construcción de un altar que inspira y eleva.
Un altar es un conjunto de objetos, dispuestos con la intención de invocar la presencia del Espíritu y elevar su conciencia al reino de lo Divino. Puede ser de cualquier tamaño, desde un escenario completo hasta una pequeña vela y una concha marina.
Los altares son excelentes para ayudar nos mantenemos centrados en nuestro trabajo espiritual mientras mantenemos nuestros pensamientos y nuestras mentes positivas y claramente enfocadas en nuestras intenciones.
Aunque realmente no hay reglas cuando se trata de crear un altar (siempre y cuando se sienta poderoso para ti) , aquí hay tres pasos simples que puede seguir.
1. Elija un punto focal principal para su altar.
Idealmente, el punto focal de su altar será una representación de la Divinidad que se siente poderoso para ti. Esto podría ser cualquier cosa, desde una imagen enmarcada o una estatua de un dios o diosa con la que te conectes particularmente, un par o tríada de deidades (como Krishna y Radha o la Triple Diosa), o algo más basado en la naturaleza, como un marco. imagen de un bosque o la Vía Láctea. Incluso un cristal o una concha de mar en espiral puede ser el punto focal de su altar si se siente bien.
2. Elija objetos de altar que se sientan sagrados para usted.
Las opciones comunes de objetos de altar incluyen flores frescas, cristales, velas, un porta incienso e incienso, un cáliz, citas o imágenes inspiradoras, banderas de oración o ofrendas naturales como piñas o bellotas. Si eres minimalista, solo uno o dos elementos están bien. Y si se inspira en los cinco elementos (tierra, aire, fuego, agua y espíritu), podría considerar elegir un elemento de altar para representar cada uno: por ejemplo, un plato de barro para representar la tierra, incienso para el aire, una vela para fuego y un cáliz para el agua (el punto focal principal puede representar el Espíritu).
3. Mantenga su altar fresco.
Los altares no están destinados a estar estancados. Más bien, es ideal para interactuar con su altar diariamente o casi a diario: encender incienso a la Divinidad, espolvorear, refrescar flores, limpiar cristales a la luz del sol o humo de salvia, etc. Los cambios estacionales también son una buena idea: como narcisos en primavera, manzanas en verano, calabazas en otoño y piñas en invierno. Permanecer despierto en nuestros altares es un acto devocional y ayuda a mantener en su lugar nuestra conciencia de la Divinidad que anima y une todas las cosas. Esto, a su vez, nos mantiene despiertos a nuestro poder y permite que ese poder fluya a través de nosotros, de manera regular y poderosa.
Relájese, deje fluir su creatividad y siga estas sencillas pautas para crea un altar que te alinee con la energía sagrada y divina del cosmos.
¿Has montado un altar usando estas pautas? ¿Como le fue? Por favor comparta los comentarios.