Baja tolerancia a la frustración: qué es y cómo gestionarla

Desarrollar tolerancia a la frustración puede ayudarlo a sortear los obstáculos y las dificultades de la vida de manera saludable.

La vida puede ser francamente abrumadora a veces, especialmente cuando parece que todo va mal. La forma en que respondemos a los desafíos de la vida puede estar determinada por varios factores.

Para algunas personas, cuando las cosas no salen según lo planeado, esto puede causar explosividad o retraimiento. Estos síntomas pueden ser un indicador de baja tolerancia a la frustración.

La baja tolerancia a la frustración es nuestra capacidad para manejar los eventos inesperados de la vida o las emociones desagradables.

Si tiene una baja tolerancia a la frustración, es posible que tenga dificultades para manejar los obstáculos para lograr una meta o completar una tarea.

Es un componente de la resiliencia pero ligeramente diferente. La resiliencia es la flexibilidad y la capacidad para hacer frente a desafíos o traumas. La tolerancia a la frustración tiene que ver con el tiempo que te toma reaccionar emocionalmente ante las dificultades.

Piense en los dos como una banda elástica: la resiliencia es la elasticidad para estirarse (cognitivamente, con perspectiva e inteligencia emocional), y la tolerancia a la frustración se refiere a la rapidez o la lentitud con la que rompemos las emociones.

Si los obstáculos le impiden alcanzar su objetivo y se siente muy abrumado o explosivo, esto puede ser una señal de que tiene una bajo umbral de frustración.

La investigación de 2017 sugiere que otras señales de baja tolerancia a la frustración incluyen:

  • desregulación emocional
  • fácilmente irritable
  • rápido para el enojo
  • problemas para aceptar la realidad
  • dilación
  • impaciencia
  • deseo de gratificación inmediata

Estos síntomas pueden hacer que los inconvenientes se sientan inmanejables.

Hay una variedad de factores que contribuyen a la baja tolerancia a la frustración. La baja tolerancia a la frustración puede ser causada por vivir con una condición de salud mental. La baja tolerancia a la frustración no es infrecuente en personas con:

La baja tolerancia a la frustración puede hacer que sea difícil superar las tareas desafiantes. Si encuentra algo frustrante, es posible que tienda a posponer la tarea ignorándola o posponiéndola. Este ciclo de postergar o evitar las cosas puede conducir a:

¿Las personas con TDAH tienen un umbral de frustración bajo?

Sí, las personas con TDAH a menudo experimentan un umbral de frustración más bajo. Por ejemplo, cuando las personas que experimentan hiperactividad o una combinación de falta de atención e hiperactividad experimentan obstáculos, pueden volverse fácilmente irritables.

Además, la desregulación emocional suele ser una señal de que tienes un umbral de frustración bajo.

Un estudio de investigación de 2020 de 67 adolescentes de 10 a 14 años encontró que los niños con TDAH demostraron una menor tolerancia a la frustración, definida en el estudio como una tendencia a abandonar una tarea conductual frustrante.

Si tiene poca tolerancia a la frustración, puede afrontarla usando estrategias para construir un umbral de tolerancia más alto.

Prueba el diálogo interno positivo

El diálogo interno negativo a menudo puede obstaculizar el desarrollo de la tolerancia a la frustración. Por ejemplo, si cada vez que enfrenta un desafío, se dice a sí mismo: “No puedo hacer esto”, ha sentado un precedente sobre cómo manejará la tarea.

Participar en un diálogo interno positivo puede ayudarlo a reducir este comportamiento. La próxima vez puede intentar algo como: «Sé que esta será una tarea desafiante, pero soy capaz».

Usa técnicas de atención plena

Las técnicas de atención plena te ayudan a orientarte hacia el aquí y ahora sin juzgar. La investigación de 2018 indica que incluso una breve práctica de atención plena puede ayudarlo a soportar eventos estresantes, lo que aumenta la tolerancia a la angustia.

Los niños pueden beneficiarse al aprender a superar la frustración de manera saludable de una manera que se pueda traducir en todos los entornos.

Si tiene un hijo con baja tolerancia a la frustración, existen algunas estrategias que puede utilizar. En un estudio de 2021 con niños de 15 a 39 meses de edad, los investigadores asignaron una tarea frustrante a los niños y observaron las respuestas de los niños y los padres.

Los comportamientos de los padres asociados con la reducción de la frustración fueron:

  • distrayendo. Hablar o desviar la atención del niño hacia otro objeto.
  • demostrando. Cuando el padre pudo aconsejar o modelar su enfoque del problema para el niño pequeño
  • Reencuadre. Proporcionar al niño un nuevo punto de vista y ofrecerle una posible solución.

Estos enfoques pueden ser aplicables para ayudar a los niños a manejar la frustración en otras situaciones. Con estas estrategias, los niños pueden eventualmente usar técnicas de distracción o reformular un problema por su cuenta.

La baja tolerancia a la frustración es típica en muchas personas, incluidas las personas con problemas de salud mental, especialmente TDAH. Puede practicar calmar o reducir la frustración en situaciones desafiantes.

Ayudar a los niños a replantear la situación o desviar su atención a otras tareas puede ser beneficioso para desarrollar habilidades de tolerancia a la frustración. En los adultos, la práctica de la atención plena o el diálogo interno positivo puede ser útil para hacer frente a situaciones agravantes.

Si tiene poca tolerancia a los contratiempos de la vida, puede considerar practicar habilidades de tolerancia a la angustia. Si todavía te sientes frustrado, puedes buscar la ayuda de un profesional de la salud mental.