Amor a primera vista: una historia loca

Entonces vi su rostro… ahora soy un creyente.

Un sentimiento que no puedes controlar.
Un momento que nunca olvidarás.
Un instante que duró toda la vida.
Un corazón nunca se completa.

Cuando finalmente estuve frente a ella, el mundo se desvaneció. Lo único que pude ver fue su sonrisa. Toda mi realidad consistía únicamente en esa sonrisa y esos ojos bailando en risa silenciosa ante la situación en la que estábamos.

Amor a primera vista.

Serendipia.

Él Era el verano antes de mudarme a Argentina y un día perfecto para bajar las ventanillas y recorrer túneles de árboles. Mi familia se estaba quedando en el lago, así que cada día, después del trabajo, conducía una hora por el campo para unirme a ellos. La ruta pronto se volvió familiar hasta el punto de que Google Maps se apagó y la música permaneció aleatoria.

Todo fluyó junto ese verano. El trabajo, el viaje, el lago, la vuelta a casa y volver a trabajar. Todo fluía junto de la misma manera que los árboles fluían junto a las ventanillas del coche como un océano de verde cambiante.

Una tarde el trabajo me dejó ir más temprano de lo habitual. Me sentía con más energía con el nuevo tiempo disponible. Me subí al auto para comenzar mi largo viaje hacia el lago. Mientras los árboles y campos familiares se deslizaban por la ruta que ahora conocía como la palma de mi mano, decidí usar mi tiempo extra para navegar un poco sin GPS.

Entonces, giré a la izquierda por un pequeño carril que nunca antes había visto.

«Pensé que el amor sólo era verdadero en los cuentos de hadas…»

tLos árboles presionaban pesadamente a ambos lados del camino. El sol sólo atravesaba el follaje en ráfagas rápidas y, ocasionalmente, en gruesos rayos de sol de la tarde. A medida que una canción se disolvía en la siguiente a través del cable AUX, el tiempo caía en un ritmo establecido por los rayos de luz y las curvas perezosas de la carretera.

“El amor estaba detrás de mí. Eso es lo que parecía”.

Como las primeras notas de Smash Mouth Soy un creyente Sonó a través de mis parlantes, todo cambió. Los árboles en el lado izquierdo de la carretera explotaron revelando un rancho en expansión con caballos pastando, graneros rojos y cercas altas en cada…