A veces extraño a mi exmarido, pero no me arrepiento de haberlo dejado

Está bien seguir amando a alguien incluso si lo estás dejando.

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Mi exmarido siempre sabía cuando tenía dolor de cabeza. Podía verlo en mi cara o en la forma en que reaccionaba ante las cosas. No los recibía a menudo, pero él siempre lo supo. Me encantó eso de él.

Es extraño, las cosas que recordamos y las cosas que extrañamos. Mi prometida nunca sabe cuando me siento mal. Puedo ocultarle mis dolores, dolores, estrés y tristeza con bastante facilidad. No es que esté tratando de ocultarlo. Me gustaría que ella se diera cuenta. Siempre me he sentido culpable al decirle a la gente que me siento mal.

Simplemente deberían saberlo. Como lo hizo mi ex.

Solía ​​creer que el amor era infalible. Cuando amabas a alguien, era un sentimiento para siempre. Escuchaba a la gente por todas partes hablando de desenamorarse o ya no amar a su pareja/cónyuge. No cabía en mi mente joven, posiblemente ingenua y romántica.

He crecido un poco desde entonces.

Ahora sé que el amor es fluido. Fluye, fluye y se desliza a través de incluso las barreras más estrechas para llenar espacios que quizás ni siquiera sabíamos que estaban allí. También sé que el amor puede cambiar.

Sin embargo, no podemos controlar el amor tanto como probablemente nos gustaría.

Ciertamente, todos conocemos a alguien que permanece en una relación mala, posiblemente tóxica, porque “todavía lo amas”. Tal vez incluso seas tú.

Una lección realmente importante que he aprendido a través de mis experiencias es que está bien seguir amando a alguien a quien estás dejando. Está bien amar a tu pareja y aun así necesitar alejarte de ella, seguir adelante o dejar que siga su camino.

Comprender el amor me ha ayudado a afrontar muchas transiciones en mi vida. Cuando las cosas empezaron a ir mal en mi matrimonio, al principio me sentí en conflicto. Sabía que él me amaba y se preocupaba por mí, como yo por él. Sin embargo, la persona en la que me estaba convirtiendo no era compatible con él ni con la persona en la que se estaba convirtiendo. ¿Pero cómo podría pensar en dejarlo si todavía nos amábamos?

Dar un paso atrás y mirar el panorama general me mostró que era posible amarlo y, sin embargo, no poder o no querer pasar el resto de mi vida con él. Hay mucho más en un…