El secreto para una melena radiante está en seguir un cronograma capilar que se ajusta a las necesidades de tu cabello. ¿La clave? Conocer a fondo tu melena y sus necesidades para que el cronograma sea realmente efectivo. Pero eso no es todo: la constancia y el tiempo son fundamentales. A veces sentimos que los productos dejan de funcionar, pero ¿sabías que puede ser porque hemos excedido su uso?
El truco está en actualizar el cronograma periódicamente. Después de todo, una vez que logramos nuestras metas, nuestro cabello evoluciona y necesita otros cuidados. Por eso, la actualización del cronograma depende del nivel de porosidad de tu cabello. ¡Así es cómo! mantenemos nuestra melena en su mejor forma!
¿Qué nivel de porosidad tiene tu cabello?
Descúbrelo con un simple prueba en casa:
- Toma 2 o 3 hebras de cabello, asegúrate de que estén limpias y sin productos.
- Colócalas en un vaso transparente con agua y espera unos minutos para observar el resultado.
¿Los resultados?
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Porosidad baja: Si el cabello se mantiene cerca de la superficie, es probable que la cutícula sea tan compacta que tu cabello resista absorber la hidratación.
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Porosidad normal o media: Si las hebras se quedan en la mitad del vaso, ¡tienes suerte! Este tipo de cabello requiere poco mantenimiento. La cutícula permite el paso adecuado del agua, manteniendo una humectación adecuada.
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Porosidad alta: Común en cabellos tratados químicamente o expuestos frecuentemente a altas temperaturas. Si las hebras se hunden rápidamente, es posible que tu cabello tenga alta porosidad, lo que puede necesitar cuidados extra para mantenerse sano.
¿En qué consistirá el cronograma? Hidratar, nutrir y reparar
El cronograma capilar se basa en tres pilares: hidratar, nutrir y reparar. Estas son las piezas clave que usaremos en todos los casos, ajustando la frecuencia de cada una según sea necesario.
- Hidratar: Piensa en el agua. La hidratación restaura y conserva el agua natural que el cabello pierde con el tiempo. Esto ayuda a mantener su flexibilidad y movimiento.
- Nutrir: Esta etapa es como proporcionar alimentos para tu cabello. Aquí ingresan los lípidos, como mantecas y aceites esenciales, que son fundamentales para mantener tu melena saludable. Estos lípidos ayudan a prevenir la deshidratación del cabello, mantienen el brillo natural y reducen el riesgo de rotura.
- Reparar: Esta etapa es fundamental para reponer la proteína, actuando como el cemento que mantiene todas las fibras capilares unidas. Es esencial cuando el cabello está dañado, ya que, sin una reparación previa, el proceso de hidratación o nutrición puede no ser efectivo. Sin embargo, es importante recordar que un exceso de proteína puede endurecer el cabello, haciendo que se vuelva quebradizo y se rompa más fácilmente. Por eso, encontrarás el equilibrio adecuado es clave para mantener la fuerza y flexibilidad del cabello.
PLANOS para 3 tipos de cabellos
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Es complicado encontrar un champú ideal para la semana 4 cuando se trata de cabellos altamente porosos. Por eso, comparto mi champú preferido, el cual recomiendo usar para reducir la porosidad del cabello de forma permanente hasta reducir la porosidad del cabello.
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