Nunca debes volver con alguien que te lastimó. Estas son las razones. Algunas personas tienen el poder de hechizarnos y tendemos a sentirnos atraídos por ellas como una polilla al fuego. Involucrarnos con esas personas sólo nos deja experiencias horribles, pero no podemos dejar de volver a ellas.
No importa cuánto lo intentemos, nuestras defensas se desmoronan en su presencia y seguimos regresando a ellos. A pesar de la traición y la tortura emocional y física, no podemos dejar de creer sus disculpas o sus promesas de mejorar y ser buenos. Estas personas son irresistibles, e incluso después de dejarlas, la tentación de volver es siempre abrumadora.
4 razones por las que nunca deberías volver con alguien que te lastimó
A pesar de la atracción y el señuelo, lo mejor para uno es deshacerse de tales relaciones y esta es la razón:
1. La gente no cambia
Si ya has tenido suficientes episodios dolorosos con un hombre o una mujer así, sabes en el fondo de tu corazón que estas personas nunca cambian. Su muestra de arrepentimiento es falsa y las cosas volverán a ser igual que antes una vez que regreses. No importa cuán débil sea tu corazón, debes levantarte y persuadirte de no volver con una persona tóxica.
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2. Tu felicidad no importa
Recuerde, sus necesidades y deseos nunca serán atendidos y siempre será el último en su lista de prioridades. No estás presente en sus vidas por motivos emocionales sino para alimentar su ego y satisfacer sus necesidades.
Si bien ser feliz está en las propias manos, sentirse solo, triste, desconsolado o insultado tampoco es deseable por las acciones del otro en una relación. Para que una relación funcione, es importante que ambos socios se sientan felices y satisfechos. En cualquier momento, si siente que sería más feliz solo, es hora de dejarlo todo.
3. No te resistas al cambio, cosas mejores te esperan
Es parte de la naturaleza humana resistirse a la idea del cambio. Esto hace que seguir adelante sea extremadamente difícil. Tendemos a asociar la comodidad con la familiaridad y seguimos volviendo a relaciones abusivas y caemos en un círculo vicioso.
Sin embargo, una vez que reúnes el coraje para seguir adelante, aportas positividad a tu vida y abres nuevos canales que permiten la entrada de nuevas personas. Con el tiempo llegarán nuevas personas que te tratarán mucho mejor haciéndote sentir querido otra vez.
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4. Tú también puedes ser feliz
No dejes que nadie te haga creer que mereces menos. Las relaciones abusivas nos llevan a creer que merecemos malos tratos. Incluso, empezamos a culparnos por el mal estado de las cosas. El primer paso hacia la redención comienza con la fortaleza de creer que no eres tú quien debe ser acusado. Cuando te vas, las ganas de volver son muy fuertes, y la ruptura es aún más difícil. Sin embargo, si eres lo suficientemente fuerte, podrás deshacerte de la relación tóxica.
Y, mientras estés pasando por la fase de curación, evita por completo el contacto con esa persona. El desamor es un sentimiento íntimo y pasará algún tiempo hasta que obtengas la fuerza para superar a una persona equivocada que intenta controlar tu mente, cuerpo y emociones y utilizarte para su beneficio.
En última instancia, eres tú quien está a cargo de tu felicidad. Sólo tú tienes la responsabilidad de salvarte de una vida miserable y ver la luz de la felicidad que realmente mereces.
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