Permanencia del objeto (Definición + Ejemplos) –

¿Alguna vez has escuchado la frase “ojos que no ven, corazón que no siente”? Esa frase no era sólo una figura retórica cuando eras un bebé. Cuando las cosas no estaban en tu campo de visión, ya no existían. En algún momento, esto probablemente te hizo llorar. ¡Tu mamá y tu papá salieron de tu cuarto y parecían haberse ido para siempre! Si bien esta falta de comprensión puede causar algunos llantos y confusión, todo es parte de su desarrollo cognitivo. Este problema se resuelve cuando los bebés desarrollan la permanencia del objeto.

¿Qué es la permanencia del objeto?

La permanencia del objeto es la idea de que los lugares, los objetos y las personas siguen existiendo después de que no podemos percibirlos. Es sólo una parte de la Teoría del Desarrollo Cognitivo de Jean Piaget. Cuando esto se desarrolla, los bebés comprenden que cuando las cosas salen de la habitación o se esconden, siguen existiendo.

Ejemplo: Peek-a-Boo

Un ejemplo clásico de permanencia de un objeto es jugar al «escondite». Cuando eres adulto y ves a otro adulto tapándose la cara con una manta, sabes que ese adulto todavía existe. Esto ciertamente hace que las escondidas sean menos emocionantes, pero te ayuda a asegurarte de que la persona no se habrá ido para siempre.

Los bebés simplemente aún no comprenden este concepto o esquema. Cuando el adulto le cubre la cabeza con una manta, el bebé cree que el adulto ha desaparecido para siempre. ¡No pueden ver al adulto, así que se han ido! La emoción de volver a ver a su madre o al adulto es bastante emocionante, razón por la cual el escondite es tan popular entre los bebés.

Estudio de la manta y la pelota de Piaget

Con el tiempo, los bebés se dan cuenta de que el adulto que está debajo de la manta todavía existe. Pero ¿cuándo sucede eso?

Ésa fue la pregunta que Jean Piaget intentó responder en la década de 1960 cuando desarrolló su Teoría del desarrollo cognitivo. La permanencia del objeto es un avance importante, especialmente si se considera que se desarrolla en alguno punto mientras el niño es todavía un bebé. Saber que las cosas que están fuera de nuestra vista todavía existen es clave para comprender el mundo que nos rodea.

Entonces Piaget inició un estudio, ahora conocido como “El estudio de la manta y la pelota”. El estudio fue sencillo. Puso una pelota frente a bebés de distintas edades y les colocó una manta mientras miraban. Luego observó a los niños. Si los niños buscaban la pelota, debajo de la manta o de otro modo, se decía que habían desarrollado la permanencia del objeto. Estos niños tenían una “representación mental” de la pelota, por lo que todavía existía para ellos. si los niños no lo había hecho intentaron buscar la pelota, es posible que aún no hayan desarrollado la permanencia del objeto. La pelota simplemente ya no existía.

¿Cuándo se desarrolla la permanencia del objeto?

A partir de su investigación, Piaget determinó que los niños desarrollaban la permanencia de los objetos cuando tenían ocho meses. Ocho meses es temprano. El niño aún se encuentra en la primera etapa del desarrollo cognitivo, la etapa sensoriomotora. Más específicamente, el niño probablemente se encuentre en la tercera subetapa de la primera etapa del desarrollo cognitivo: la etapa de reacciones circulares secundarias de la etapa sensoriomotora.

Esta subetapa enfatiza la repetición de acciones que producen resultados agradables. Dentro de esta fase, comienza el descubrimiento de la permanencia del objeto, lo que sienta las bases para desarrollos cognitivos más complejos a medida que envejecen.

Por supuesto, ocho meses no están escritos en piedra. Estudios adicionales han criticado el estudio de Piaget por las motivaciones que podría tener un niño para buscar una pelota o ignorarla. Es posible que el niño simplemente no esté interesado en buscar la pelota. Y cuando se trata de desarrollo cognitivo, estas edades varían para cada niño en particular. Mientras que un niño puede no desarrollar la permanencia del objeto hasta los ocho meses, ¡otro puede desarrollarla tan pronto como a los cuatro meses! Otros estudios posteriores al estudio Blanket and Ball de Piaget han confirmado este rango de edades.

¿Qué animales desarrollan la permanencia del objeto?

Si bien los bebés desarrollan una comprensión de la permanencia de los objetos como parte de su maduración cognitiva, el fenómeno no es exclusivo de los humanos. Muchos animales también demuestran la capacidad de captar el concepto de permanencia del objeto, y esta capacidad varía según la especie y las etapas de desarrollo.

Mamíferos y aves

  1. Perros: El mejor amigo del hombre es bastante experto en este ámbito. Los cachorros comienzan a desarrollar la permanencia en el objeto a las 5 semanas de edad. Es por eso que jugar a buscar o al escondite con juguetes se convierte en una actividad atractiva para ellos.
  2. Gatos: Los gatos, conocidos por su naturaleza juguetona y curiosa, también muestran signos de permanencia de objetos. Sus comportamientos de caza y de abalanzarse juguetonamente sobre los juguetes (o, a veces, sobre sus pies debajo de la manta) indican que comprenden que un objeto todavía existe incluso si está fuera de la vista.
  3. Aves: Algunas aves, especialmente los córvidos como los cuervos y los cuervos, son conocidas por su inteligencia. Han demostrado comprensión de la permanencia de los objetos, especialmente al esconder y recuperar alimentos. Los loros también muestran una comprensión de este concepto durante el juego y las actividades de búsqueda de alimento.

Otros animales

  1. Primates: Muchos primates, como los chimpancés y los orangutanes, exhiben un fuerte sentido de permanencia de los objetos. Sus habilidades cognitivas les permiten usar herramientas, ocultar objetos e incluso engañar a otros miembros del grupo, lo que indica una profunda comprensión de la existencia continua de los objetos.
  2. Cefalópodos: Algunos estudios sugieren que los pulpos podrían tener una comprensión rudimentaria de la permanencia de los objetos. Su capacidad para utilizar herramientas, esconderse e interactuar con su entorno muestra complejidad cognitiva.
  3. Roedores: Se ha demostrado que las ratas y los hámsteres, utilizados a menudo en estudios de laboratorio, tienen cierto nivel de comprensión de la permanencia de los objetos, especialmente cuando se trata de actividades de almacenamiento de alimentos y búsqueda de alimento..

Implicaciones y observaciones

Comprender la permanencia de los objetos entre diferentes especies enfatiza la importancia evolutiva de este rasgo cognitivo. Reconocer que la presa o el peligro todavía existe cuando no está a la vista puede ser crucial para la supervivencia de muchos animales. Además, para las especies que almacenan alimentos, reconocer los depósitos ocultos es vital para su sustento.

Si bien salir de casa puede hacer que su perro se sienta solo, tenga la seguridad de que sabe que usted todavía existe y espera ansiosamente su regreso. De manera similar, varios animales, desde los cielos hasta los océanos, transmiten este conocimiento de maneras cruciales para su supervivencia e interacciones diarias.

Este es un hito importante en el desarrollo

La permanencia del objeto ayuda a los bebés a predecir lo que sucederá a continuación. Establece las bases de la idea de que el mundo existe fuera de su propia existencia y representa los inicios del pensamiento abstracto. Esta comprensión es fundamental para las próximas etapas cognitivas, donde se desarrollan el razonamiento, la resolución de problemas y procesos de pensamiento más avanzados. En verdad, este es un hito emocionante en el viaje de un niño hacia la comprensión del mundo que lo rodea.

Apoyar el desarrollo de la permanencia del objeto en los niños

Darse cuenta de que los objetos siguen existiendo incluso cuando están fuera de la vista es un salto cognitivo significativo para los bebés. Como cuidadores o padres, ustedes desempeñan un papel crucial a la hora de fomentar esta comprensión. Al participar en actividades específicas y ser observador, puede apoyar e identificar el desarrollo de la permanencia del objeto de su hijo.

Observar señales clave

Antes de sumergirse en las actividades, es fundamental reconocer cuándo su hijo está empezando a comprender el concepto.

  • Reacción ante la ausencia: Si su hijo se molesta cuando usted sale de la habitación y luego se calma rápidamente cuando regresa, es posible que esté comenzando a comprender que usted continúa existiendo incluso cuando está fuera de su vista.
  • Comportamiento de búsqueda: Cuando un juguete está parcialmente escondido debajo de una manta, ¿intenta su hijo descubrirlo? Esto indica que entienden que el juguete todavía está allí.

Actividades prácticas para fomentar la permanencia de los objetos

  • Cucú: Este antiguo juego no es sólo por diversión. Es una forma práctica de demostrar que incluso cuando algo (o alguien) está oculto, sigue existiendo. A medida que su bebé comience a comprender el concepto, es posible que incluso inicie el juego él mismo, cubriéndose la cara o los ojos.
  • Escondite con juguetes: Inicialmente, esconda un juguete parcialmente debajo de una manta frente a su hijo. A medida que comprendan los conceptos básicos, puede hacer que el juego sea más desafiante escondiendo completamente los juguetes y animando a su hijo a encontrarlos.
  • Contenedores y Tazas: Ofrézcale a su hijo vasos o recipientes apilables. Esconda un juguete pequeño debajo de uno de ellos, mézclelos y deje que su hijo lo encuentre.
  • Seguimiento de objetos: Mueva un juguete dentro y fuera de la línea de visión de su hijo. Por ejemplo, podrías pasear a un animal de juguete detrás de un libro, dejar que «se asome» de vez en cuando y luego observar si la mirada de tu hijo lo sigue.
  • Despedidas consistentes: Despídete siempre de tu hijo al salir, aunque llore. Con el tiempo, las salidas y regresos constantes les enseñan que usted regresará, reforzando la permanencia del objeto.

Evite escabullirse

Cuando necesite irse, evite escabullirse mientras su hijo está distraído. Esto puede generar ansiedad. En cambio, como se mencionó anteriormente, diga siempre adiós. Esto establece un patrón: te vas, pero también regresas.

Utilice el lenguaje para narrar acciones

Incluso si su hijo no comprende completamente las palabras, narre lo que está haciendo. Diga: «Estoy poniendo el osito de peluche debajo de la manta. ¿A dónde fue? ¿Puedes encontrarlo?». Esto les ayuda a conectar el lenguaje con las acciones, reforzando el concepto.

Fomente el juego imitativo

Si su hijo tiene una muñeca o un animal de peluche favorito, úselo para reflejar sus actividades. Por ejemplo, imagine que la muñeca está jugando al escondite con otro juguete. El juego imitativo puede ayudar a consolidar la comprensión.

El desarrollo de la permanencia del objeto es uno de los muchos hitos cognitivos en la vida de un bebé. Al ser observadores y participar en estas actividades específicas, los padres y cuidadores pueden apoyar esta fase esencial de comprensión, preparando el escenario para desarrollos cognitivos más complejos en el futuro.