Cómo manipular a un manipulador (4 Tácticas) –

Manipular a alguien significa obligarlo a hacer algo que no es lo mejor para él. Las manipulaciones siempre suponen algún coste para el manipulado y un beneficio para el manipulador.

La manipulación es diferente de la influencia. Puedes influir en alguien para que haga algo que sea lo mejor para él.

Por ejemplo, una campaña de marketing que lo influye para que compre un producto que mejora su vida no es manipulación porque mejorar su vida es lo mejor para usted.

Por otro lado, una campaña de marketing que te influye para que compres algo que no te sirve de nada es definitivamente manipulación. El especialista en marketing gana y usted pierde. En la manipulación siempre se gana o se pierde.

Detectando manipulación

A menudo, las personas no se dan cuenta de que están siendo manipuladas hasta que es demasiado tarde. Entonces, lo mejor que puedes hacer para evitar ser manipulado es detectar la manipulación en sus primeras etapas.

Las señales de que estás siendo manipulado incluyen:

  • Te sientes emocionalmente agotado después de tus interacciones con un manipulador.
  • Te sientes impotente e indefenso
  • Te sientes culpable, irrespetado y devaluado.
  • Te sientes presionado a actuar de cierta manera.
  • Te sientes frustrado y confundido

Quizás hayas notado que todos los signos anteriores comienzan con “Te sientes…”. Esto se debe a que la manipulación suele ocurrir a nivel emocional. La manipulación emocional es poderosa y puede detectarse fácilmente a nivel de las emociones.

Tienes que notar los cambios en tu energía emocional para saber si estás siendo manipulado o no.

Nunca asumas que la manipulación se basa en un hecho puntual. Si es un manipulador, es probable que intente manipularte repetidamente. Busque patrones.

Una vez que vea los patrones, intente descubrir qué intenta ganar el manipulador al manipularlo.

Ahora que tienes un patrón de comportamiento y un motivo, puedes vencer al manipulador en su propio juego.

Cómo manipular a un manipulador

Aquí hay algunas tácticas universales que pueden contrarrestar casi todas las formas de manipulación:

1. Ignorar al manipulador

Tan pronto como te des cuenta de que estás siendo manipulado, opta por no participar en su juego. Deja de darle más energía al manipulador. Un manipulador necesita tu compromiso para manipularte.

Cuando no estás comprometido, ninguna de sus tácticas funcionará. Sea como una pared al interactuar con ellos. Todo lo que dicen y hacen rebota en ti.

Retrasar la reacción y darse tiempo para responder adecuadamente o no responder en absoluto.

2. No mostrar emociones

Si estás en un punto en el que ya no puedes optar por no participar en su juego, es probable que un manipulador se haya apoderado de tus emociones. Te han tenido involucrado emocionalmente.

Esto suele ocurrir cuando personas cercanas a nosotros nos manipulan. Es fácil ignorar a los extraños, pero ignorar a amigos y familiares es difícil y puede tener consecuencias.

Una vez que estás bajo el control emocional de tu manipulador, no puedes evitar sentirte afectado emocionalmente por las cosas que dice y hace.

No importa cómo te sientas por dentro, evita expresarlo por fuera. Esto puede resultar difícil de hacer, especialmente para las personas que tienden a ser expresivas y honestas. Pero debes hacerlo si quieres quitarle el poder a tu manipulador.

Cuando un manipulador ve que puede presionar tus botones emocionales, te controlará como a un títere.

Cuando vean que no te afectan emocionalmente, concluirán que eres difícil de manipular.

3. Asertividad

Usar la asertividad para contrarrestar la manipulación puede ser arriesgado porque implica un buen nivel de compromiso. Si eres asertivo con tu manipulador, probablemente te hundirás más en su trampa y te involucrarás en un conflicto.

Aunque su objetivo debe ser minimizar el contacto con el manipulador tanto como sea posible, a veces la confrontación y el conflicto son necesarios.

Si ignorar y ser emocionalmente inexpresivo no funciona, te verás obligado a ser asertivo o incluso agresivo.

Cuando alguien te manipula, te domina. Obtienen poder sobre ti. Puedes quitarles el poder usando la asertividad o la agresión.

Ejemplos de comunicación asertiva serían:

«Sé que estás tratando de manipularme».
«No toleraré ese comportamiento de tu parte».

La agresividad implica cierta devaluación del manipulador para reequilibrar el poder:

«Deberías avergonzarte de tu comportamiento».
«Esperaba ese comportamiento de mierda de tu parte».

4. Usando la lógica

Dado que la mayoría de las tácticas de manipulación son emocionales, siempre puedes usar la lógica para contrarrestarlas.

Tenga en cuenta que requiere un mayor nivel de compromiso por su parte. Por lo tanto, debes reservar este método solo para las personas más cercanas a ti.

Un manipulador a menudo utilizará algún razonamiento emocional sesgado para manipularte. Por ejemplo, podrían decir algo como:

«Tú siempre Hazme esto”. (Haciéndote sentir culpable)
«Eres un fracaso». (Devaluándote)

Puedes cuestionar la primera afirmación diciendo algo como:

«¿Siempre? ¿Está seguro? Pensemos en ejemplos en los que hice lo contrario”.

Y la segunda declaración de:

«¡Impresionante! Cometo un error y soy un fracaso. ¿Qué pasa con todas las veces que no me equivoqué?

Como puedes ver, te estás defendiendo aquí. Está bien defenderse en relaciones cercanas cuando hay mucho en juego.

Tenga en cuenta que el uso de la lógica sólo funciona con personas lógicas. Si su manipulador no es lógico, es mejor seguir los métodos anteriores.

5. Jugando su juego

Conoces sus patrones de comportamiento. Conoces sus motivos. ¡Excelente!

Tienes todo lo que necesitas para darles el golpe definitivo.

Primero, déjales pensar que se están saliendo con la suya al hacer precisamente lo que esperan que hagas.

Te retiras justo antes de que al final consigan esa gran victoria. No haces lo que esperaban que hicieras. O haces exactamente lo contrario. Hacerlo los arrojará a lo más profundo de la confusión y la frustración.

Habrán invertido mucho tiempo y energía en manipularte y no tendrán nada que mostrar a cambio.

Seguro que no volverán a meterse contigo.