YAyer, mi novio y yo decidimos darle un paso más al romance y programar sexo.
Esa mañana, mientras él estaba frente a su computadora, me senté a horcajadas sobre él y le besé el cuello. Sin embargo, él estaba en medio de postularse para un programa de posgrado, por lo que respondió pidiéndome que revisara su currículum, lo cual no pude rechazar. (Avance profesional, ¡diablos, sí!)
Después, comimos un humeante almuerzo con salsa casera de frijoles y verduras en tortillas, y luego él procedió a hacer un movimiento: «¿Quieres pasar el rato conmigo aquí…?» dijo con la ceja medio levantada y la cabeza inclinada hacia el dormitorio.
«Sí, pero tengo la barriga llena», respondí, «nos vemos en media hora».
Quizás puedas identificarte. Estás en una relación con alguien que amas. Sin embargo, el feroz impulso de saltar sobre sus huesos ha disminuido. Poco a poco, otras prioridades se han interpuesto en el romance.
Cuando mi novio y yo nos juntamos por primera vez, mi corazón se aceleró hasta que me mareé. No había sexo programado porque ya era bastante difícil mantener nuestras manos alejadas.
A veces desearía volver a sentirme así. Que iba de pasajero en un Ferrari rojo con la capota bajada y el viento en el pelo. Crucero. No conducir un Honda por la misma carretera por la que he pasado cientos de veces para mi cita de las 2 pm para establecer relaciones.
En otras palabras, desearía que el sexo no fuera una decisión consciente dirigida por la mente sino una sumisión a mis impulsos más primarios.
Quiero lo que tienes; Foto de Andrés Pons
Sin embargo, sé que lo que siento es normal. La nueva energía de las relaciones, el subidón que percibimos como amor, proviene en gran medida de la incertidumbre de estar con alguien nuevo. Es emocionante precisamente porque no sabemos qué va a pasar después. Un año después de una relación, esa duda que inspira preguntas como «¿Él también me ama?», «¿A dónde nos llevará esto?» y «Es demasiado encantador». ¿Es un asesino en serie? comienza a desvanecerse.
A medida que las respuestas se vuelven más seguras, ganamos seguridad en la relación y perdemos…