Y cómo empezar a tener citas para encontrar una relación sana.
Foto de Wendel Moretti de Pexels.
Lo ves todo el tiempo en las películas: una chica se enamora de un chico que la trata como una mierda. Un día está interesado y al siguiente no le importa. Él la intimida e incluso la insulta disfrazada de broma.
Pero la chica se desmaya de todos modos y el tropo lo convierte en una gran comedia romántica de Netflix. Pero en la vida real no es tan lindo.
Este tipo de relaciones son dolorosas, pero es posible que te encuentres voluntariamente entrando en ellas. Sabes que la persona con la que estás hablando no te trata como te mereces. O peor aún, justificas su mal comportamiento por lo amables que son cuando están juntos.
Una y otra vez, sales con personas que no son adecuadas para ti. Pero cuando te encuentras con una persona genuinamente buena, no te atrae de la misma manera.
Entonces, ¿por qué te atrae alguien que no es para ti? Bueno, es un poco complejo.
Si tus padres no estuvieron disponibles cuando eras niño o tuvieron una mala relación, eso podría afectarte como adulto. Las investigaciones muestran que buscamos experiencias amorosas similares a las de nuestra infancia porque es todo lo que conocemos.
Piensa en el amor que viste a tu alrededor como un modelo a seguir. Cuando creces, asumes que así es como funciona el amor. Entonces, si tu mamá te abandonó cuando eras niño o tu papá fue malo con tu mamá, tus posibilidades de buscar parejas que no te traten bien aumentan significativamente.
Salir con alguien que te provoca un dolor similar al que experimentaste cuando eras niño es adictivo. Esperas que las cosas salgan mejor esta vez, como adulto, aunque nunca sea así.
No basta con decir que tus padres son los únicos culpables de tu atracción por las personas que son malas para ti. Leer lo anterior podría haberte hecho pensar: «¡mis padres eran geniales!»
Si es así, entonces la raíz del problema puede ser una de sus relaciones pasadas. Estar en una relación que terminó en una dolorosa angustia podría…