“Donde hay ira, siempre hay dolor debajo”. – Eckhart Tolle
La mayoría de nosotros hemos experimentado nuestra parte justa de enojo y dolor, unos más que otros. Pero, ¿alguna vez te detuviste a pensar qué hay debajo de toda esa ira? ¿Cuál es la raíz de la causa? En muchos casos, puede ser difícil discernir o señalar el origen de la emoción o identificar la causa exacta. Todo lo que sabes es que tienes ganas de explotar, las cosas simplemente no van bien y parece que no puedes superarlo. A veces eso significa que arremete verbalmente o se comporta de manera poco saludable, como tomando en exceso, comer en exceso compulsivamenteparticipar en actividades promiscuas o conducta sexual de riesgo. En el extremo, incluso podrías causarte daño a ti mismo o a otros, emocionalmente y tal vez incluso físicamente. Sin embargo, antes de que su ira se salga totalmente de control, un poco de autorreflexión y algo saludable albardilla las medidas pueden salvar el día.
Permítete algo de libertad.
Primero, date un poco de libertad. Reconozca que hay una razón para este enojo y permítase la oportunidad de profundizar en lo que puede haber detrás. Sin embargo, esto no te permite gritar a los demás, tirar cosas a la pared, sabotear deliberadamente tu trabajo o el de otra persona o ser hipercrítico con los esfuerzos de alguien, incluido el tuyo. Significa que puede presionar el botón de pausa en su ira y tratar de descubrir las razones más lógicas para ello y luego emplear algunos mecanismos de afrontamiento efectivos para superar la ira y sigue con tu vida.
Averiguar la causa probable.
Por ejemplo, puede estar enojado por el éxito de los demás. Debajo de su ira y celos bien puede estar el sentimiento de dolor que no puede proporcionar a sus seres queridos porque carece del ingrediente necesario, combinación de suerte y circunstancias o alguna otra razón por la que no tiene tanto éxito como el persona con la que crees que estás enojado. No estás enojado con él o ella tanto como estás enojado contigo mismo. La causa raíz aquí es el dolor que sientes, siendo inadecuado, un fracaso, incapaz de seguir adelante, lo que sea.
Una vez que reconozca la causa probable, el dolor debajo de la ira, puede comenzar a idear un plan o enfoque que lo ayudará a superar la ira y el dolor y tomar acciones más constructivas.
¿Puedes sentir dolor sin que esté asociado con la ira? Decididamente sí, como en el caso del dolor físico causado por una condición médica subyacente. Si bien puede estar enojado porque tiene dolor, el dolor no es la causa de su enojo. Aun así, la ira y el dolor suelen ir de la mano. Aprender a lidiar y manejar ambos de manera efectiva es crucial para poder vivir una vida saludable, feliz, productiva y autorrealizada.
Considere varios métodos y enfoques de afrontamiento.
¿Como hacer esto? Hay varios métodos de afrontamiento y enfoques a considerar.
- Siempre se recomienda consultar a un médico para descartar una posible afección médica o recibir tratamiento para una que ya haya sido diagnosticada.
- Aprende y practica estrés-técnicas de reducción, incluyendo meditación, yogaejercicios de respiración profunda, ejercicios físicos, caminar en la naturaleza, leer un libro agradable, pasar tiempo con sus seres queridos y amigos.
- Hable con un amigo de confianza, un ser querido o un miembro de la familia y pídale apoyo mientras supera su enojo y dolor. Te sorprendería lo dispuestos que están aquellos que se preocupan por ti cuando pides ayuda. De acuerdo con esto, prepárate para corresponder cuando otros acudan a ti para pedirte ayuda.
- Piensa antes de hablar. Esta respuesta tardía le dará tiempo para sopesar lo que está a punto de decir, lo que podría evitar que cometa un error colosal al decir algo inapropiado cuando podría tener consecuencias duraderas. Emplee esta técnica donde y cuando normalmente dejaría escapar lo que tiene en mente. Los ejemplos incluyen: maldecir o burlarse de un conductor imprudente o desconsiderado, murmurar palabras de enojo a su jefe o compañero de trabajo cuando no le gusta el trabajo que le han dejado sin ceremonias o siente que lo están estafando mientras otros patinan, tomando Exprese su enojo con sus seres queridos y familiares, y envíe un mensaje de texto o correo electrónico grosero o emocional, entre otros.
- Trabaje en mejorar su dieta para que incluya buenas cantidades de alimentos saludables.
- Asegúrate de mantenerte hidratado. Su cuerpo requiere líquidos para una salud y un funcionamiento óptimos.
- Estimule su cerebro con acertijos desafiantes, juegos de palabras, ideando soluciones creativas para problemas cotidianos.
- Sé agradecido por todo lo bueno que tienes. Gratitud es una emoción que da poder a la vida.
- Comparte tus experiencias con otros para que puedan beneficiarse de tu sabiduría acumulada.
- Reir a menudo. La risa es gratis y genera buenas cantidades de endorfinas, las sustancias químicas naturales del cuerpo para sentirse bien.
- Ten una buena noche y duerme.
- Enfatiza tu lado espiritual con la oración.
- Luchar por un sentido de equilibrio en la vida: en casa, en el trabajo, con amigos, vecinos y conocidos.
- Elimina las distracciones cuando estés tratando de relajarte. Reduzca el tiempo de tecnología para que su cerebro pueda desconectarse y revitalizarse. Esto, a su vez, ayuda a disminuir el estrés.
- Sea un buen amigo, compañero de trabajo y vecino.
- Haz una lista de las metas que quieres perseguir y actúa para lograrlas una por una.
- Sueño grande. Hay algo increíblemente liberador en pensar en los artículos de tu lista de deseos. Si desea algo con la suficiente fuerza, puede encontrar una manera de realizar esa idea, aunque solo sea parcialmente.
- Si la ira tóxica continúa y se extiende a otras partes de su vida, causando consecuencias negativas, vea un terapeuta para ayudarte a encontrar una manera de superarlo.
Recuerde que si bien la ira y el dolor pueden estar causándole problemas, puede hacer algo al respecto. No es necesario vivir con ellos. Tampoco debes resignarte a hacerlo. Sin embargo, es su elección en cuanto a lo que hace, en la mayoría de los casos.