Cómo vencer una adicción

Vivir con un trastorno adictivo puede ser un desafío, pero con tratamiento y un sistema de apoyo sólido, es posible una recuperación a largo plazo.

La adicción puede afectar a cualquier persona, independientemente de su edad o situación económica.

Algunas personas creen erróneamente que la adicción y el trastorno por uso de sustancias son el resultado de un defecto de carácter o falta de fuerza de voluntad. Incluso podrían pensar que la recuperación es tan simple como “simplemente decir que no”.

Es posible que haya escuchado esto y crea que la razón por la que no puede vencer la adicción, o que tiene un problema de uso de sustancias, es porque es débil.

Usted podría preguntarse, «¿Por qué no poder ¿Yo paro?» «¿Hay algo mal conmigo?»

Vencer la adicción no es tan fácil como desear detenerse. Hay diferencias cerebrales involucradas que podrían obstaculizar incluso las mejores intenciones.

Pero si se pregunta cómo combatir la adicción, hay maneras de hacer que su viaje de recuperación sea un poco más fácil.

Las personas con adicción o trastorno por uso de sustancias continúan teniendo comportamientos o usando sustancias independientemente del impacto adverso en sus vidas. El uso continuado de sustancias puede conducir a la dependencia física. Otros síntomas de adicción pueden incluir:

  • tener impulsos o antojos
  • experimentando una reducción de la ansiedad y un estado de ánimo elevado durante el uso o el comportamiento
  • pasar mucho tiempo usando
  • renunciar a actividades que antes disfrutaba para usarlas

La recuperación puede parecer desafiante para algunos y casi imposible para otros. Tratar de arreglárselas solo puede hacerlo aún más difícil.

Si tiene un trastorno adictivo o relacionado con sustancias y está trabajando para recuperarse, considere comunicarse con un ser querido para obtener ayuda y responsabilidad.

Muchos programas de tratamiento y rehabilitación que enseñan a las personas cómo vencer la adicción las alientan a tener un patrocinador que les brinde responsabilidad, empatía y apoyo. Un estudio de 2016 encontró que casi el 69% de los participantes informaron haber tenido un patrocinador al menos una vez.

En este estudio, aquellos que tenían un patrocinador y una fuerte relación con el patrocinador tenían más probabilidades de participar en un programa de 12 pasos y practicar la abstinencia del uso de sustancias.

Cuantas más personas pueda acudir en busca de apoyo, aliento y un oído atento, mayores serán sus posibilidades de recuperación.

Trate de averiguar qué provoca su comportamiento compulsivo o el uso de sustancias.

Tal vez busca una bebida solo cuando está con amigos particulares o en un restaurante o bar específico. Tal vez anhelas la emoción de apostar solo cuando estás aburrido o estresado.

Prevenir la recurrencia del uso o los comportamientos siendo consciente de los lugares, las personas o las emociones que actúan como desencadenantes podría ser una parte esencial de su recuperación.

El uso prolongado de sustancias podría cambiar la función y la estructura del cerebro. Podría afectar partes del cerebro responsables de:

  • premio
  • aprendiendo
  • memoria
  • control de comportamiento

Los expertos creen que la abstinencia continua del uso de sustancias podría darle al cerebro el tiempo que necesita para recuperarse de esos cambios y volver a su función normal. Las recurrencias de uso frecuente, por otro lado, pueden hacer que la recuperación tome más tiempo.

Una vez que haya identificado las causas o las indicaciones de su uso de sustancias o comportamiento compulsivo, considere desarrollar un plan para controlarlos y practicar la evitación.

Si cree que podría tener una adicción o un trastorno por uso de sustancias, considere comunicarse con un profesional de la salud de confianza para una evaluación y discutir sus opciones.

Es posible que puedan derivarlo a un profesional de la salud mental o al programa de tratamiento que mejor se adapte a sus necesidades. El tratamiento puede incluir varias opciones, que incluyen:

No existe un tratamiento único para la adicción. Cada persona es diferente, y lo que funciona para una persona puede no funcionar para otra.

Un profesional de la salud mental que se especialice en trastornos adictivos y relacionados con sustancias puede diseñar un plan de tratamiento que se adapte mejor a sus necesidades.

Aquí hay algunos recursos que podrían ayudar:

  • SAMSHA. La Administración de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias tiene una línea de ayuda nacional (1-800-662-4357) que es gratuita, confidencial y está disponible las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Es posible que puedan orientarlo en la dirección correcta para obtener ayuda y soporte cerca de usted o en línea.
  • Coalición Nacional para la Reducción de Daños. La NHRC es un grupo de defensa que brinda apoyo y recursos a las personas con trastornos por uso de sustancias.
  • Las drogas y yo. Esta organización fue creada por un grupo de educadores, científicos y analistas. Drugs and Me ofrece una lista de materiales educativos que pueden ser útiles.

Un estudio de 2016 muestra que los grupos de apoyo brindados por pares, incluidos los programas de 12 pasos, podrían ser útiles cuando se está recuperando de la adicción.

Estos grupos están diseñados para ayudarlo a mantenerse sobrio a través del apoyo mutuo brindado por personas que también están en recuperación.

Alcohólicos Anónimos y Narcóticos Anónimos son dos grupos de pares bien conocidos para personas en recuperación de un trastorno por uso de sustancias.

Aunque útiles, los programas de 12 pasos no son para todos. Si no son adecuados para usted, considere buscar grupos de apoyo para la recuperación cerca de usted.

Es posible que haya oído hablar del eje intestino-cerebro (GBA), pero lo que quizás no sepa es el impacto que tiene en los trastornos adictivos.

Su GBA es una comunicación bidireccional entre su sistema nervioso central (SNC) y el sistema nervioso entérico (ENS). El SNC es el cerebro y la médula espinal, y el ENS son los nervios del sistema digestivo.

Un estudio de 2015 respalda la conexión entre el cerebro y los microorganismos intestinales debido al GBA. De hecho, los microorganismos intestinales desequilibrados podrían desempeñar un papel en los trastornos adictivos, según un estudio de 2016.

Lo que comes podría afectar funciones cerebrales como:

  • emoción
  • cognición
  • apetito
  • estados de comportamiento
  • reactividad al estrés
  • regulación de la ansiedad

La nutrición es una parte necesaria de la recuperación de la adicción. Mejorar sus hábitos alimenticios podría ayudarlo a controlar sus emociones, pensar con más claridad y reducir el impacto del uso de sustancias.

Probar nuevas actividades para reemplazar las que no son tan beneficiosas podría ayudarlo en el camino hacia la recuperación.

Una revisión de 2020 encontró que la aptitud física y los ejercicios de mente y cuerpo podrían ser útiles en el proceso de sobriedad.

Otro estudio de 2016 encontró que la meditación consciente también podría mejorar el estado de ánimo y el autocontrol y reducir el estrés, lo que podría ser útil para las personas con adicciones.

A veces, a pesar de nuestros mejores esfuerzos, volvemos a los viejos patrones.

Hacer cualquier cambio en el estilo de vida es difícil y mantener ese cambio a lo largo del tiempo puede ser un desafío.

Puede estar preparado si su plan de tratamiento falla. Aquí hay algunas cosas que puedes probar:

  • tener un patrocinador o un ser querido de confianza al que pueda llamar cuando tenga antojos
  • evitar lugares o personas que puedan hacerlo más propenso a usar sustancias
  • Tener otra actividad que podrías hacer, como caminar o trotar, cuando llegue el antojo.
  • recompensarte por alcanzar tus metas, incluso las más pequeñas

La recuperación de un trastorno adictivo y relacionado con sustancias es posible, pero requiere un fuerte compromiso.

Esto puede ser un reto, pero no estás solo.

Puede ser útil rodearse de familiares y amigos de confianza porque su apoyo es de gran ayuda en la recuperación.

Si necesita ayuda adicional, comuníquese con un profesional de salud mental para analizar otras opciones de tratamiento, que pueden incluir tratamiento residencial o para pacientes hospitalizados.