Las personas con una imaginación hiperactiva se involucran en fantasías vívidas y prolongadas que pueden parecer tan reales como la vida real.
Para muchas personas, especialmente los niños, soñar despierto y la fantasía son pasatiempos saludables.
Como adultos, es posible que sueñe despierto con una relación, unas vacaciones soñadas o conseguir el trabajo que realmente desea. Puede ayudarte a resolver problemas y expresar tu creatividad.
Sin embargo, soñar despierto puede convertirse en un rasgo dañino cuando comienza a interferir con la vida diaria y causar angustia.
A continuación, le mostramos cómo saber si tiene afecciones como el trastorno de ensoñación desadaptativa o la personalidad propensa a la fantasía (FPP, por sus siglas en inglés) y cómo sobrellevarlas.
Las personas con una imaginación hiperactiva pasan gran parte de su tiempo en un mundo creado por ellos mismos.
Estos individuos tienen una imaginación rica y vívida, experiencias sensoriales intensas y una gran capacidad para dar significado a estas imágenes y sentimientos. Tienden a ser buenos narradores de historias y jugadores de rol y pueden dejarse llevar por sus ensoñaciones.
Fantasear también podría distraerlos de la vida real y tener consecuencias para la salud mental.
Las personas con imaginación hiperactiva pueden clasificarse como personas con ensoñación inadaptada o FPP. Sin embargo, ninguna condición está reconocida en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, 5ª edición (DSM-5).
Soñar despierto desadaptativo
La principal diferencia entre las dos condiciones es que las personas con ensoñación desadaptativa son conscientes de que sus fantasías están separadas de la realidad, pero las que tienen FPP pueden no darse cuenta.
Las personas con ensoñación inadaptada fantasean con desconectarse del estrés y el trauma mejorando su estado de ánimo. Para muchos, sus sueños vívidos los ayudan a experimentar una sensación de intimidad y compañerismo y son una forma de sentirse más poderosos.
Personalidad propensa a la fantasía
FPP se considera un rasgo de personalidad que se identificó por primera vez a principios de la década de 1980 debido a la investigación de Josephine Hilgard, quien observó la capacidad de las personas para ser hipnotizadas.
Los investigadores descubrieron que aquellos que podían ser hipnotizados fácilmente tenían más probabilidades de participar en fantasías vívidas durante largos períodos. Algunas investigaciones sugieren que las personas que son propensas a la fantasía tienen dificultades para discernir sus fantasías y recuerdos falsos de la realidad.
Se estima que entre el 2 % y el 4 % de las personas pueden ser propensas a las fantasías.
Una persona con una imaginación hiperactiva puede experimentar los siguientes signos y síntomas:
- grandes cantidades de tiempo invertido en mundos de fantasía complejos y detallados
- las fantasías son tan animadas como una película
- dificultad para controlar el deseo de fantasear
- fantasear interfiere con las relaciones y metas
- vergüenza y esfuerzos para mantener el comportamiento oculto de los demás
- problemas para diferenciar entre fantasía y realidad
- se siente y actúa como otra persona
- nunca te aburres porque fantasear quita el aburrimiento
- Síntomas psicosomáticos, es decir, sentir calor o frío con solo pensar en algo caliente o frío.
- alucinaciones
- disociación o cambio entre dos o más identidades
- experiencias fuera del cuerpo
Algunos investigadores creen que ambas condiciones son diagnósticos distintos, mientras que otros estudios sugieren que son síntomas de otras condiciones de salud mental, como el trastorno de identidad disociativo (TID) o el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC).
Otros investigadores creen que las fantasías prolongadas son una forma de adicción conductual.
Si bien existe un debate en curso sobre cómo categorizar la ensoñación desadaptativa y la FPP, es cierto que pueden causar comportamientos y consecuencias poco saludables en la vida diaria, como:
- incapacidad para concentrarse en conversaciones o responsabilidades
- falta de productividad y retiro de actividades sociales y pasatiempos
- no hay control sobre soñar despierto, incluso cuando la vida exige concentración
- depender de soñar despierto para sentirse emocionalmente estable
- consecuencias negativas en el trabajo y la escuela y en las relaciones debido a soñar despierto
No está claro exactamente qué causa una imaginación hiperactiva, pero los investigadores han proporcionado información sobre las posibles causas o factores de riesgo.
Las personas que son propensas a la fantasía tienen más probabilidades de tener un historial de soledad o haber experimentado castigos físicos con más frecuencia, según muestra la investigación.
La imaginación hiperactiva puede estar relacionada con las siguientes condiciones o rasgos de personalidad:
- Síntomas disociativos (una sensación de estar separado de ti mismo y de las emociones)
- síntomas obsesivo-compulsivos, como el pensamiento mágico
- niveles anormales de serotonina
- esquizotipia, o rasgos que pueden aumentar el riesgo de esquizofrenia
- experiencias alucinatorias
- creatividad
- neuroticismo, o ser rápido para experimentar emociones negativas
- despersonalización o experiencias fuera del cuerpo
Otras condiciones que pueden ocurrir junto con la ensoñación inadaptada incluyen:
Dado que la FPP y la ensoñación inadaptada no son condiciones oficiales, no existe una mejor práctica para tratarlas. Si descubre que su imaginación hiperactiva está interfiriendo con su vida y causando angustia, considere los siguientes consejos:
1. Identifica tus factores desencadenantes
Determina cuándo empiezas a soñar despierto. ¿Es en la cama por la noche? ¿Cuando vas en el coche? Trate de pasar menos tiempo en espacios donde sea propenso a comenzar a fantasear. Considere escuchar un podcast o un audiolibro educativo para distraerse.
2. Encuentra un pasatiempo externo que disfrutes
Elija un pasatiempo, preferiblemente uno que use sus altos niveles de creatividad. Considere escribir una historia en la que pueda trabajar todos los días y mantenga una historia en marcha. Esto le permitirá aprovechar su don para contar historias y tal vez incluso publicar algo.
Considere unirse a un grupo de ficción en línea donde pueda compartir su historia y creatividad con otros.
3. Mantén un horario más ocupado
Si te encuentras fantaseando mucho porque tienes demasiado tiempo libre, considera programar más actividades externas que te mantengan conectado con el mundo real. Cuando tenga tiempo libre, considere leer un libro de no ficción o ver un documental.
4. Practica la atención plena
Considere la posibilidad de practicar la atención plena. En un estado consciente, enfocas tu conciencia en el momento presente, mientras reconoces y aceptas suavemente tus sentimientos, pensamientos y sensaciones corporales.
5. Llama a un amigo
Pasar tiempo con los demás te permite estar presente. Llama a un amigo o sal a cenar. Intente programar más reuniones en días en los que tenga mucho tiempo libre.
6. Prueba la terapia
Si no puede reducir las fantasías por su cuenta, considere consultar a un terapeuta que pueda ayudarlo a desarrollar habilidades para mantenerse presente.
¿Buscas un terapeuta, pero no sabes por dónde empezar? El recurso Cómo encontrar apoyo de salud mental de Psych Central puede ayudar.
7. Explora la medicación
Un estudio de caso encontró que la fluvoxamina, un medicamento para el TOC, ayudó a disminuir los síntomas de la ensoñación inadaptada. Puede hablar con su profesional de la salud para analizar esta opción.
8. Practica la autocompasión
Muchas personas propensas a la fantasía son duras consigo mismas cuando sienten que sus fantasías están fuera de control. Es importante ser amable contigo mismo y recordar el lado positivo de estos rasgos. Es probable que sea una persona muy creativa y un narrador.
Dejar de fantasear probablemente será un desafío. Recuerda que eres humano y que no todos los días saldrán según lo planeado. Comenzará a desarrollar un amor propio más profundo a medida que se enfoca en desarrollar su resiliencia y celebrar su deseo de mejorar.
Si tienes una imaginación hiperactiva, es probable que seas una persona muy creativa con grandes habilidades para contar historias.
Pero si sus fantasías ocupan la mayor parte de su día, interfieren con las relaciones o el trabajo, o le causan angustia, hay varias cosas que puede hacer. Tal vez incluso puedas aprovechar tu imaginación hiperactiva y convertirla en una salida creativa.
Comenzará a construir, o reconstruir, relaciones sólidas a medida que trabaje con un profesional de la salud mental y sea consistente con los nuevos límites en torno a no fantasear. Mejorar puede ser un viaje largo, pero la paciencia y el compromiso abrirán una vida más rica, basada en la realidad.