Cuando una aventura termina abruptamente: sus próximos pasos

Tomar medidas conscientes para el autocuidado y medidas deliberadas con su pareja principal puede ayudar a ir más allá de una aventura.

La mayoría de los asuntos son una ráfaga de pasión, secretos y un ímpetu relámpago. Entonces, cuando toda esa energía se detiene repentinamente debido a que la atraparon, la conciencia de alguien o el deseo no coincidente, una o ambas personas pueden sentirse desconcertadas sobre qué hacer con todas sus emociones.

Según la Asociación Estadounidense de Terapia Matrimonial y Familiar, se estima que el 25 % de los hombres y el 15 % de las mujeres tienen relaciones sexuales con alguien fuera de su cónyuge. Los asuntos de relaciones afectivas o físicas sin coito aumentan estas cifras en un 20%.

Si bien las aventuras varían en duración, la mayoría finalmente llega a su fin en algún momento, lo que puede desencadenar muchas emociones.

Sentirse deprimido una vez que termina una aventura no es inusual.

«Es [typical] para que las personas experimenten una sensación de pérdida y tristeza, especialmente si la ruptura fue inesperada”, explica Parisa Ghanbari, psicoterapeuta registrada en Toronto, Canadá.

“Al igual que cuando un [monogomous] termina una relación, terminar una aventura puede ser impactante y desgarrador”, agrega.

Así, “durante los primeros meses, es [understandable] para que uno se aflija emocionalmente, extrañe a su pareja e incluso se sienta enojado si no tomó la decisión de terminarlo”, comparte Ghanbari.

Está bien si también sientes otras emociones.

“También es posible sentir cierto alivio de que la aventura haya terminado, ya que implica el final de la ansiedad que a menudo acompaña al secreto y al engaño”, dice Afshan Mohamedali, psicóloga clínica licenciada en Nueva York.

Aunque a veces deseamos lo contrario, no podemos encender y apagar los sentimientos.

“Como cualquier relación, la cantidad de tiempo que lleva ‘superar’ una aventura varía”, explica Mohamedali.

Sin embargo, en algunos casos, el tiempo que tardan las emociones en calmarse es más largo que la aventura en sí.

“Por lo general, lleva de seis meses a un año recuperarse emocionalmente”, dice Ghanbari. “Si uno está tardando más [than this] para recuperarse, es posible que esté lidiando con un duelo complicado”.

Por el bien de todos los involucrados, es esencial seguir adelante y dejar atrás la relación externa. Pero, ¿cómo puedes hacer esto de manera efectiva? Usted puede considerar:

Recurriendo a los seres queridos

“Comunicarse con amigos y apoyarse en su apoyo emocional después de la ruptura puede ayudar”, dice Ghanbari.

Hablar de sus sentimientos y recibir consejos de familiares y amigos es algo más que el simple acto de conversar. La investigación de 2015 muestra que el apoyo emocional que brinda un círculo interno contribuye a reducir los niveles de angustia.

Ser responsable

Asumir la responsabilidad de lo que sucedió puede ser incómodo, pero hacerlo es vital.

“Asumir la responsabilidad por tus acciones y las consecuencias que han tenido es la mejor manera de avanzar”, señala Mohamedali. “Con la honestidad viene la oportunidad de recibir el perdón, incluso de ti mismo”.

Teniendo en cuenta el ‘por qué’

Reconocer los factores impulsores detrás de por qué entró en la aventura le permitirá abordar cualquier problema, ya sea individualmente o dentro de su relación principal, y avanzar de manera más consciente.

Mohamedali sugiere hacerse autopreguntas para ayudarlo a comprender sus acciones. Por ejemplo:

  • ¿Para qué me sirvió la infidelidad en ese momento?
  • ¿Cómo me sentía cuando estaba con la otra persona?
  • ¿Cómo puedo encontrar formas conscientes de volver a sentirme así?

Siguiendo la regla 10-10-10

La “regla 10-10-10”, popularizada por la autora y periodista Suzy Welch, consiste en preguntarse cuáles serán las consecuencias de su(s) acción(es) en el próximo:

  • 10 minutos
  • 10 meses
  • 10 años

“Aplicando [the 10-10-10 rule] puede ayudar a regular las emociones abrumadoras y dolorosas inmediatas que vienen después de la aventura”, explica Ghanbari. “Ayuda a replantear la situación y pensar de manera más racional y clara”.

Superando la culpa

Es comprensible sentirse culpable por sus acciones y su impacto negativo en los demás.

Sin embargo, es clave comprender que “la culpa prolongada no lo ayudará a avanzar ni lo motivará a realizar los cambios que espera realizar”, revela Mohamedali.

Buscando ayuda profesional

“Hay mucho que entender cuando una aventura llega a su fin, y tú [may] haz esfuerzos para volver a comprometerte con tu relación y contigo mismo”, señala Mohamedali.

Hablar con un terapeuta o consejero puede ayudarlo a resolver «pensamientos y sentimientos aparentemente conflictivos», agrega.

Los terapeutas sexuales cuentan con formación especializada en temas de:

  • asuntos
  • trauma de traición
  • preocupaciones de relación

El hecho de que haya tenido una aventura puede no significar que no ama a su pareja y quiere que su relación principal funcione. Si ambos eligen hacerlo, juntos pueden volver a encarrilar las cosas con tiempo, esfuerzo, compasión y comprensión.

Para ayudar a lograr esto, Mohamedali comparte algunos enfoques cruciales:

  • La paciencia es clave. “Tenga en cuenta que la aceptación y la confianza toman tiempo para reconstruirse”.
  • Prepárate para el cambio. “Acepta que la relación con la que te estás volviendo a comprometer podría no ser la misma y que está bien si cambia”.
  • Sea más transparente. “Tu pareja probablemente sea sensible a los secretos y propensa a las sospechas. Eso es [typical].”
  • Apreciarse unos a otros. “Recuerden que cada día es una decisión de estar juntos”.
  • Considera la terapia de pareja. Esto proporciona «un espacio neutral y seguro para expresar sus pensamientos, procesar el pasado y escuchar el dolor de los demás».

Al igual que las relaciones monógamas, las aventuras pueden tener un costo emocional cuando terminan.

Ya sea que regrese o no a su relación principal, trabajar con sus sentimientos y acciones es esencial para cerrar la puerta a una aventura y ayudar a prevenir más angustia.

Recibir el apoyo de amigos, asumir la responsabilidad y dejar de lado la culpa son todos los pasos que pueden ayudar a seguir adelante, y no tenga miedo de buscar ayuda profesional si encuentra que sanar es un desafío mayor.