Empoderar a sus pacientes y guiarlos para que se den cuenta de sus fortalezas internas para enfrentar las dificultades de la vida son algunos de los objetivos centrales de la consejería.
Saber qué preguntas hacer a los pacientes en diferentes puntos del proceso de asesoramiento es vital, ya que sus pacientes estarán más inclinados a reflexionar sobre sus dificultades. En última instancia, esto aliviará la angustia y promoverá un cambio duradero (Prout & Wadkins, 2014).
Este artículo proporcionará esquemas específicos de cómo puede estructurar su entrevista de asesoramiento, con preguntas que puede utilizar en diferentes etapas del proceso.
El objetivo de estos recursos es ayudarlo a desarrollar una conexión significativa con sus pacientes mientras se embarcan en un viaje de asesoramiento hacia la autocomprensión y un cambio significativo.
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¿Qué es la entrevista de consejería? 2 tipos
Las entrevistas de consejería son multifacéticas y pueden ser estructuradas o más fluidas, dependiendo de la etapa de la relación terapéutica en la que se lleven a cabo. La conversación debe caracterizarse por el respeto, la empatía y la escucha activa. El consejero también debe tener en cuenta su afecto y tono a lo largo de la discusión (Prout & Wadkins, 2014).
En la práctica clínica, hay dos tipos de entrevistas que utiliza un médico para ayudar a comprender las dificultades que traen los pacientes a su práctica (Kelly, 2020). Cada entrevista tiene un propósito diferente, pero la entrevista en general tiene como objetivo brindar al médico más información sobre sus pacientes para que pueda brindar el tratamiento y la orientación pertinentes.
Una entrevista clínica estructurada es una guía semiestructurada descrita en la quinta edición del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-V). Cada trastorno clasificado en el DSM-V tiene una guía semiestructurada de preguntas que los psicólogos clínicos o los médicos capacitados en el reconocimiento de estos trastornos pueden formular para determinar si un paciente cumple con los criterios diagnósticos para un trastorno en particular (Kelly, 2020).
Dado que estas preguntas del DSM-V son específicas de un trastorno en particular, este estilo de entrevista solo debe usarse en una entrevista de asesoramiento si el paciente desea explorar su predisposición a un trastorno en particular. Se necesitará la confirmación y el análisis adicional de un psicólogo clínico o médico para diagnosticar al paciente formalmente.
Una entrevista clínica se centra más en facilitar la conversación entre el paciente y el consejero. Aunque todavía hay un enfoque en construir una relación con el paciente, el propósito de esta entrevista es comprender su vida y qué aspectos de ella se ven afectados. Este tipo de entrevista generalmente se realiza durante la primera sesión de consejería y se usa para ayudar a determinar la trayectoria de las conversaciones en sesiones posteriores.
5 buenas preguntas para tu primera sesión
La primera sesión se centra en comprender el problema que se presenta, que es el nivel actual de funcionamiento del paciente. Además, el consejero puede hacer preguntas sobre la historia de las dificultades que los han llevado a la consejería (Prout & Wadkins, 2014).
Dado que la primera sesión con un cliente debe centrarse en lo que lo impulsó a buscar asesoramiento, las preguntas pueden ser más enfocadas y estrechas para que pueda brindarle el apoyo que mejor se adapte a sus necesidades (Prout & Wadkins, 2014).
La primera pregunta siempre debe ser, ‘¿Que te trae aquí hoy?’ Esto le brinda la oportunidad de preparar el escenario para futuras sesiones y comprender qué es lo que preocupa al paciente. Una pregunta como esta creará una atmósfera positiva y de apoyo en la que es más probable que se abran y sean receptivos al cambio.
Para explorar más a fondo el razonamiento detrás del problema que se presenta, es importante comprender los factores internos y externos que están presentes en sus vidas. Las preguntas que profundizan más en las experiencias pasadas y presentes de un paciente incluyen:
- Cómo era tu infancia? ¿Puedes contarme sobre el crecimiento de tu familia?
- ¿Hay alguna relación (romántica o no romántica) que haya afectado su perspectiva personal o su funcionamiento diario?
- Cuando encuentra dificultades, ¿cuáles son sus mecanismos de afrontamiento actuales?
- ¿Cuáles crees que son tus puntos fuertes? Describa una instancia en la que los haya usado.
Aunque no existe un orden prescriptivo para hacer estas preguntas de fondo, en algún momento de su primera sesión, debe preguntarle a su paciente qué es lo que idealmente le gustaría obtener de la consejería.
Incluso si su paciente no tiene una respuesta de inmediato, es importante que trabajen juntos para comprender esto, ya que les permitirá a ambos tener un nivel óptimo de funcionamiento para trabajar en las siguientes sesiones.
9 preguntas de evaluación útiles
Además de determinar la intención de su paciente de buscar asesoramiento y cómo quiere que su vida mejore como resultado, también es importante recopilar información que aborde las preocupaciones del paciente y sirva como punto de partida para la planificación (Balkin & Juhnke, 2014).
Evaluación es un proceso, no un medio para un fin en la consejería, ya que permite que los consejeros decidan qué problemas deben abordarse primero y qué tipo de tratamiento e intervenciones deben implementarse (Balkin & Juhnke, 2014).
Por lo tanto, es natural que la parte de evaluación de su sesión sea más formal y se centre en evaluar la salud mental y física de su paciente, y podría incluir temas como:
- Historial de hospitalizaciones – ‘¿Cuántas veces has estado hospitalizado? ¿Para qué?’
- medicamentos – ‘¿Actualmente estás tomando algún medicamento? Si es así, ¿para qué y cuál es la dosis?
- Experiencia terapéutica previa – ‘¿Alguna vez has tenido terapia antes? Si es así, ¿qué tipo de intervenciones terapéuticas/practicantes ha visto?’
- Ideación suicida – ‘¿Alguna vez ha tenido pensamientos de suicidarse o ha intentado suicidarse? ¿Qué motivó o desencadenó estos pensamientos?’
- Sintomatología – ‘¿Qué tipo de síntomas han afectado su funcionamiento diario? Califique la gravedad y la frecuencia de cada síntoma.’
Después de obtener un historial completo de la salud mental y física de su paciente, puede reducir los recursos y las herramientas de evaluación formal que pueden ayudarlos en sus sesiones juntos.
Proceso de la Entrevista: Guía Paso a Paso
Después de realizar las evaluaciones clínicas iniciales, cada sesión posterior con los pacientes se considera una entrevista informal. Aunque la entrevista puede no estar tan estructurada como las evaluaciones iniciales, cada sesión está alineada con un enfoque de asesoramiento por etapas que está orientado a guiar al paciente hacia una acción viable que mejorará su calidad de vida.
Cada etapa del proceso de la entrevista ayudará a construir esta conexión entre usted y sus pacientes. Dependiendo del tiempo que tenga con sus pacientes, estas etapas se pueden dividir o ejecutar en función de las limitaciones de tiempo. A continuación, se incluye un resumen de las etapas que debe seguir al tratar de establecer una relación significativa con sus pacientes (adaptado de Cameron, 2008):
- Paso uno: hacer una conexión
La primera parte de la entrevista debe centrarse en establecer una buena relación con sus pacientes, como la demografía, el historial y las razones por las que buscan asesoramiento (Ivey & Ivey, 2003). Las preguntas deben ser abiertas y tener como objetivo dar a cada sesión un propósito específico. ¿Qué te lleva a la consejería? ¿En qué le gustaría enfocarse en la sesión de hoy? ¿Qué podemos hacer hoy que te ayude a seguir adelante? - Paso dos: identificar las fortalezas y metas individuales
Durante este paso, la atención se centra en lograr que el paciente reconozca sus puntos fuertes y los reconozca a través de la autoafirmación. Para preparar el escenario, los consejeros pueden hacer preguntas a los pacientes que ayuden a sacar sus fortalezas internas, tales como: ‘¿Dónde crees que están tus puntos fuertes?’ o ‘Háblame de un momento en que te sentiste bien por algo que hiciste.’
Después de dibujar estos escenarios, los consejeros pueden pasar a ayudar a los pacientes a aprender cómo usar autoafirmaciones positivas para ayudarlos a aumentar su confianza y mejorar su percepción de sí mismos.
Las autoafirmaciones positivas deben ser relevantes para la lucha del paciente y ayudarlo a alcanzar las metas que se propuso lograr en sus sesiones. Por ejemplo, si un paciente tiene problemas de imagen corporal, debe centrar las afirmaciones en elogiar su cuerpo (“soy hermosa”) y su fuerza (“soy fuerte y puedo vencer”).
- Paso tres: estrategias viables para el cambio
El último paso es que usted y el paciente elaboren un plan práctico para ayudarlo a cambiar su comportamiento. En esta parte final de la sesión, usted y el paciente trabajarán juntos para elaborar un plan de acción.
Los objetivos deben ser claros y debe haber un plan establecido para garantizar la rendición de cuentas. Haciendo preguntas como ‘¿Cómo planea aplicar lo que ha aprendido en la sesión de hoy en sus actividades diarias?’ y ‘¿Cómo podemos trabajar juntos para hacer un plan para que continúes sintiéndote empoderado?’ ayudará a dar a los pacientes estrategias viables para ayudar a ajustar su comportamiento.
Cómo usar preguntas abiertas: 9 ejemplos
Hay dos enfoques amplios para las preguntas en la consejería: preguntas abiertas y cerradas.
Las preguntas cerradas son menos amplias y se utilizan para obtener información muy específica de sus pacientes, por ejemplo, información médica o arreglos de vivienda (Balkin & Juhnke, 2014).
Las preguntas abiertas no están estructuradas y están destinadas a brindarle más información sobre eventos únicos y, cuando se usan estratégicamente, se pueden formatear para obtener información específica sobre varias partes de la vida del paciente (Instituto Australiano de Consejeros Profesionales, 2009).
Las formas específicas en que se pueden utilizar las preguntas abiertas en las sesiones de asesoramiento dependen de la información que desee de sus pacientes. Esta sección proporciona una descripción general de cómo puede convertir preguntas simples en preguntas abiertas para ayudar a que sus pacientes se abran (Instituto Australiano de Consejeros Profesionales, 2009):
- «Cómo» Las preguntas permiten a los pacientes hablar sobre sus sentimientos. ‘¿Cómo te hace sentir esta situación particular? ¿Cómo moldeó esta experiencia su perspectiva actual?’
- «Qué» Las preguntas lo ayudan a obtener hechos específicos relacionados con una situación que ha dado forma a la perspectiva de su paciente: ‘¿Que pasó aquí? ¿Qué papel jugó (persona) en esta situación?’
- «Cuando» Las preguntas se centran en el momento en que ocurrió una situación o evento. ‘¿Cuando esto pasó?‘
- «Dónde» Las preguntas brindan información específica sobre el entorno o el lugar donde se llevó a cabo el evento. ‘¿Dónde ocurrió esta situación? ¿Dónde ocurrieron la mayoría de estos eventos difíciles?’
- «Por qué» Las preguntas se centran en las razones que llevaron al evento o cualquier información relacionada con él. ‘¿Por qué (persona) reaccionó de esa manera? ¿Por qué sucedió X en este momento en particular?‘
Las preguntas durante la sesión de consejería están destinadas a proporcionar nuevas áreas de discusión y brindarle claridad al conocer la razón por la cual sus pacientes buscaron consejería.
Las 17 mejores preguntas para tus sesiones
Una gran parte de saber qué y cómo hablar con sus pacientes implica construir un fuerte vínculo emocional. El vínculo emocional entre consejeros y terapeutas podría incluir escuchar con compasión y empatía o