¡En nuestra casa somos grandes amantes de los animales! Crecí con perros y ahora mis hijos también. Los estudios han demostrado que tener perros como mascotas puede ser increíblemente beneficioso, especialmente para los niños con autismo y/o TDAH. Para aquellos que quieran dar un paso más, algunas familias han adquirido un perro de terapia o de servicio para su hijo con autismo. Entonces, ¿qué tienen los perros que ayudan tanto con el autismo como con el TDAH?
Nuestro hijo J creció con cuatro perros durante su infancia y adolescencia. Primero, estaba mi perro labrador amarillo llamado Venus. Ella tenía 10 años cuando él nació y falleció cuando J tenía solo dos años. Obviamente no la recuerda mucho. Luego estaba Sarge, nuestra maravillosa mezcla de Terranova, que era el perro más cariñoso que he conocido. Él realmente era el “gigante gentil” que era tan bonito que detenía el tráfico literalmente cuando yo lo acompañaba. La gente simplemente tenía que saber qué tipo de perro era y paraban sus autos para preguntarme. Sarge estuvo con nosotros durante 11 años y lo extrañamos mucho.
Ahora tenemos dos perros maravillosos: Darla, que es mitad husky/mitad chucho, y Lincoln, que es una tonta mezcla de American Staffordshire Terrier/Boxer/y quién sabe qué más. A nuestra familia le encantan los perros y ellos le han aportado muchos de los beneficios que menciono a continuación a J y, en la mayoría de los casos, a toda nuestra familia.
¿Cómo ayudan los perros con el autismo y el TDAH? Un perro puede:
1. Reducir los niveles de estrés familiar
El estrés es un factor importante al vivir con un niño con autismo/TDAH. Sus desafíos de comportamiento y la cantidad de atención necesaria afectan a toda la familia. Los estudios demuestran que los padres se benefician de niveles más bajos de estrés al tener un perro como mascota.
2. Reducir las crisis
Las crisis son involuntarias y generalmente causadas por una sobrecarga sensorial. La presencia de un perro puede brindar apoyo al niño cuando se siente abrumado por sus sentidos. Este apoyo puede generar menos crisis en general para un niño con autismo/TDAH.
3. Aumentar la confianza
Algunas investigaciones han demostrado que los niños con autismo que tienen una mascota o un perro de terapia/servicio tienen niveles más altos de independencia y confianza. Los estudios indican que los niños autistas con perros eran más capaces de presentarse, responder preguntas y pedir más información.
4. Mejorar las habilidades sociales
Un perro es un gran iniciador de conversación. Cuando un niño tiene un perro y a otros niños les gustan los perros, les da algo en común. Las buenas habilidades sociales son muy importantes y nuestros niños con autismo/TDAH suelen tener dificultades con las situaciones sociales. Tener un perro ayuda a los niños a interactuar más entre sí y les ayuda a aumentar sus habilidades sociales.
5. Proporcionar efecto calmante
Cuando su hijo está molesto, los perros pueden ayudarlo a calmarlo. Sé que nuestros dos hijos a menudo pasaban tiempo acariciando y abrazando a nuestros perros cuando estaban tristes, ansiosos o heridos. El perro pudo ayudarlos a calmarse más rápido que cualquier cosa que nosotros, como padres, pudiéramos hacer.
6. Dar apoyo emocional
Además de calmar a los niños (¡y a los padres!), los perros brindan apoyo emocional general. Por lo general, son maravillosos oyentes. Nuestra perra Darla fue entrenada como perro de terapia (aunque nunca recibió su certificación), por lo que se siente atraída instantáneamente por cualquiera de nosotros cuando sentimos emociones fuertes. Ella suele estar en medio de cualquier situación, ofreciéndonos su apoyo. Los estudios han demostrado que los perros pueden ayudar especialmente cuando alguien está deprimido y/o ansioso.
7. Enseñar habilidades de planificación
Seamos realistas: los perros pueden suponer mucho trabajo. ¡Sin embargo, valen la pena! Necesitamos pasearlos, jugar con ellos, alimentarlos, limpiarlos y más. Al hacer que su hijo con autismo/TDAH le ayude con estas tareas, podrá aprender valiosas habilidades para la planificación. También aprenderán la importancia de ser coherentes con las tareas que deben realizarse a diario.
Si no le gustan los perros, las investigaciones muestran que otras mascotas también son útiles para los niños con autismo/TDAH. Entre ellos se pueden incluir cobayas, hámsteres, gatos e incluso peces.
Entonces, ¿tienes perros que ayuden con el autismo y el TDAH? Si es así, deja un comentario a continuación y compártelo con otros. ¡Apoyémonos unos a otros en este viaje!