Sin duda, perder a una madre puede tener un profundo efecto en tu vida. Incluso como adultos, todavía necesitamos la presencia de nuestros padres de vez en cuando.
Los efectos psicológicos de perder a una madre en la infancia son diferentes a los de perder a una madre cuando se es adulto.
Para un niño, perder a uno de sus padres puede ser devastador y causar un gran trauma a lo largo de la vida. Para un adulto, es una pena perder a uno de sus padres, pero para la mayoría de las personas es mucho más fácil de sobrellevar. Sin embargo, esto no significa que esta pérdida no tenga efectos sobre la salud mental.
Antes de analizar los efectos psicológicos de la pérdida de una madre, veamos las etapas del duelo. Muchos de nosotros aprendemos sobre esto en la escuela, pero puede haber algunas personas que nunca hayan oído hablar de estas etapas.
- Negación
- Enojo
- Negociación
- Depresión
- Aceptación
Efectos psicológicos de perder a una madre
Ahora, con este conocimiento básico de las etapas del duelo, podrá comprender mejor algunos de los efectos psicológicos que mencionaré a continuación. Es importante señalar que el proceso natural del duelo implica pasar por las etapas y llegar a la aceptación.
No hay un límite de tiempo para alcanzar el duelo integrado o la aceptación, pero hay diferentes ideas sobre lo que es saludable y lo que no lo es. A continuación, se enumeran algunos de los problemas psicológicos que puede experimentar cuando pierde a su madre.
1. Mayor riesgo de depresión
Perder a una madre puede aumentar el riesgo de sufrir depresión. Y si ya sufres depresión, este acontecimiento vital puede exacerbar tus síntomas negativos.
Algunos de los síntomas de la depresión incluyen problemas de sueño, letargo y llanto frecuente. Una muerte en la familia tan pronunciada también puede provocar un aumento de la disociación relacionada con la depresión.
2. Trastorno de duelo prolongado
El duelo normal por la pérdida de una madre tiene un proceso, como ya he dicho antes. A menudo se transforma de síntomas de llanto e insomnio (duelo agudo) a aceptación (duelo integrado), que es la última etapa del duelo.
Sin embargo, algunos efectos muestran signos de estar atrapado en una angustia aguda, en algún punto entre la negación y la negociación. El hijo adulto se obsesiona con el ser querido fallecido. En este estado, puede sufrir de falta de sueño, falta de interés en la vida y vacío. Este estado también puede afectar las relaciones, causando aislamiento.
3. Mayor ansiedad por el envejecimiento.
Cuando los hijos adultos presencian la muerte de una madre, les puede recordar su propia mortalidad. Este recordatorio, aunque básicamente normal, puede convertirse en una obsesión que les genere ansiedad.
Si ha perdido a su madre recientemente, es posible que experimente ansiedad por su salud física, especialmente por cuestiones relacionadas con el proceso natural de envejecimiento. Si bien puede recurrir a una mayor actividad física para mejorar su salud, también puede encontrarse sumido en pensamientos ansiosos sobre su propia muerte.
Aunque la muerte nos llega a todos, es importante vivir la vida al máximo. Es importante detectar los signos de ansiedad existencial lo antes posible.
4. Abuso de sustancias
Parece que el abuso de sustancias puede ser consecuencia de diversas experiencias de vida. Y en el caso de perder a un padre, es algo habitual. Perder a una madre puede ser una experiencia abrumadora, que puede llegar incluso al punto de causar angustia psicológica.
El dolor no desaparece con facilidad y es posible que intentes “ahogar tus penas” en alcohol (a veces, las drogas también son una solución rápida). Además, beber en exceso es peligroso para ti y para los demás. Por eso es importante buscar ayuda después de perder a un padre si ya bebes.
5. Disminución de la autoestima
Cuando llega el duelo, la estabilidad emocional se ve destrozada, al menos temporalmente. Y cuando las emociones están fuera de control, se puede perder el sentido de identidad por un tiempo.
Esto afecta negativamente a tu autoestima porque estás confundido acerca de quién eres, considerando que no tienes control sobre tus emociones. Después de la pérdida de una madre, puede ocurrir una disminución dramática de la autoestima antes de que te des cuenta de lo que sucedió.
6. Sentimientos de desplazamiento
Después de perder a una madre, algunas personas se sienten completamente desplazadas de la sociedad. Esto suele ocurrir si la relación con su madre era muy estrecha o si aún vivía en casa de la madre. Si la pérdida fue repentina, este sentimiento de desplazamiento puede ser bastante intenso.
Para complicar aún más las cosas, este sentimiento puede durar semanas, incluso meses. En casos excepcionales, puedes quedarte atrapado en esta emoción. Es muy importante buscar ayuda profesional si tienes problemas para reintegrarte a la sociedad después de la muerte de un ser querido.
Vida y muerte: un proceso natural
Nacemos y por eso también moriremos. Nadie vive para siempre. Sí, parece una tontería decirlo, pero a muchas personas les cuesta aceptar la idea de la mortalidad, mucho más cuando pierden a un ser querido.
Perder a una madre tiene muchos efectos psicológicos, y estos son solo algunos de ellos. La pérdida de un ser querido es intensa y, a veces, saca a la luz partes ocultas de nosotros. Es importante recordar que, si alguna emoción se vuelve demasiado intensa para poder manejarla, debemos pedir ayuda.
Juntos podemos transitar esta vida, esta existencia en constante cambio. Juntos podemos encontrar la paz y la fuerza para perseguir nuestras metas y sueños. ¡Nunca te rindas!