El estrés puede tener efectos tanto físicos como cognitivos. Aquí hay 5 signos cognitivos de estrés y cómo esto puede afectarlo más adelante en la vida.
El estrés es una respuesta humana natural que desarrollamos para ser conscientes y protegernos del peligro.
Aunque a menudo se pinta como tal, el estrés no siempre es algo malo. En ciertas situaciones, puede ayudarlo a tener la energía o la fuerza para enfrentar cualquier desafío que se le presente.
Pero el estrés, especialmente el estrés crónico, puede afectar su funcionamiento cognitivo. Su cerebro necesita asignar recursos a la situación estresante en cuestión, lo que puede quitarle energía a otras habilidades cognitivas.
El estrés puede tener efectos negativos en su salud física, mental, emocional y cognitiva.
Cuando hablamos de la cognitivo efectos del estrés, nos referimos a cualquier forma en que el estrés afecta la capacidad de su cerebro para completar tareas, tanto simples como complejas.
Las habilidades cognitivas pueden incluir cualquier cosa, desde resolver problemas hasta memorizar cosas.
Aquí hay 5 formas específicas en que el estrés puede afectar sus habilidades cognitivas.
Olvido
La investigación de 2017 sugiere que el estrés puede manifestarse cognitivamente a través de la memoria. El estrés puede afectar su cerebro de una manera que lo vuelve más olvidadizo de lo normal o incluso que no recuerda las cosas.
Esto podría deberse a que su cerebro necesita asignar energía a otras tareas durante momentos de estrés, lo que lo lleva a cometer errores por descuido sin darse cuenta.
La forma en que su cerebro aprende y recuerda nueva información también podría verse afectada por el estrés, según un estudio de 2017.
pensamiento rígido
La investigación de 2018 afirma que el estrés también puede conducir a estilos de pensamiento más rígidos.
Cuando está bajo estrés, es más probable que tome decisiones por hábito. Cuando está libre de estrés, su cerebro es más flexible, lo que le permite tomar decisiones basadas en sus objetivos generales.
Dificultad con la concentración
Las personas que están bajo mucho estrés a menudo tienen dificultades para concentrarse y enfocarse. Es posible que descubras que puedes prestar más atención a la situación que te está causando estrés, pero te resulta difícil concentrarte en cualquier otra cosa.
Si está muy estresado, es posible que su atención se distraiga, incluso durante conversaciones y reuniones importantes.
Los problemas de concentración pueden volverse tan graves que comienzan a interferir con su funcionamiento en el trabajo o en el hogar.
preocupación constante
El estrés también afecta su forma de pensar y puede hacer que las preocupaciones pasen constantemente por su mente.
Puede notar que cuando enfrenta altos niveles de estrés, es difícil dejar de preocuparse por lo que sea que esté causando el estrés.
Podrías preocuparte por los aspectos estresantes del trabajo incluso cuando no estés allí, o preocuparte por tu relación cuando necesites estar trabajando.
Falta de criterio
El estrés puede hacer que tomes malas decisiones, incluso si normalmente tienes buen juicio. Los efectos cognitivos del estrés pueden hacer que seas más impulsivo de lo normal o que simplemente no pienses bien las decisiones.
Un estudio de 2012 encontró que los participantes bajo estrés fueron significativamente menos precisos en sus juicios profesionales que el grupo de control (que no enfrentó ningún factor estresante).
En un estudio de 2019, los participantes en el grupo de estrés tenían menos probabilidades de tomar medidas en dilemas morales que los participantes en el grupo de control.
En general, el estrés se puede dividir en dos tipos: agudo y crónico.
El estrés agudo es lo que sientes cuando te enfrentas a un desafío inmediato. Por ejemplo, podrías experimentar un estrés agudo mientras tu jefe te regaña, pero volver a sentirte relajado después de que se vaya de la oficina.
El estrés crónico describe cuando las personas pasan un largo período de tiempo bajo estrés. Las víctimas de abuso infantil son un ejemplo de un grupo que está en riesgo de estrés crónico.
Otros grupos incluyen:
- refugiados politicos
- gente que vive en la pobreza
- personas víctimas del racismo estructural
El estrés crónico puede dañar su salud de manera irreparable. Además de los síntomas cognitivos que podría enfrentar en el momento en que está estresado, el estrés crónico también se asocia con el deterioro cognitivo general y la pérdida cognitiva en la edad adulta tardía.
Un gran estudio de 2014 muestra que los adultos mayores que experimentan estrés crónico tienen más probabilidades de tener un funcionamiento cognitivo más bajo que otras personas de su edad.
Esto es cierto en diversas poblaciones y puede ser aún más relevante para los grupos oprimidos y marginados que tienen más probabilidades de enfrentar estrés sistémico y comunitario.
Los estudios han encontrado que tanto los ancianos afroamericanos como los chinos americanos con mayor estrés percibido tienen más probabilidades de experimentar un deterioro cognitivo.
La investigación de 2019 encontró que los ancianos de la comunidad LGBTQ+ tienen un mayor riesgo de deterioro cognitivo cuando se enfrentan al estrés crónico de las minorías.
Un estudio de 2005 que examinó los efectos del estrés en las primeras etapas de la vida de las ratas descubrió que incluso un breve período de estrés durante los primeros años de vida puede causar el deterioro de ciertas partes y procesos del cerebro (como el hipocampo). Esto puede conducir a trastornos cognitivos más adelante en la vida.
El estrés crónico también se asocia con una mayor probabilidad de desarrollar demencia.
Aunque los investigadores aún no han encontrado un vínculo directo entre la demencia y el estrés, una revisión sistemática de 2020 encontró que un mayor estrés percibido se asocia con un mayor riesgo estadístico de demencia. Pero se necesita más investigación.
Debido a que hay muchos factores involucrados en la demencia, es difícil decir si el riesgo elevado encontrado en este estudio se debe al estrés oa otros factores.
El estrés crónico puede causar una respuesta inflamatoria, junto con otros cambios biológicos, en el cerebro, lo que puede conducir al deterioro cognitivo e incluso a la demencia más adelante en la vida.
Todavía no sabemos exactamente cómo el estrés contribuye al deterioro cognitivo a largo plazo, pero es probable que esté relacionado con la forma en que el estrés afecta biológicamente al cerebro.
Algunos cambios cerebrales que podrían jugar un papel incluyen:
- efectos inflamatorios y posinflamatorios
- función endocrina dañada
- deficiencias en el hipocampo
- hormonas del estrés
- cambios en la estructura neural
Si está bajo mucho estrés, considere practicar el cuidado personal y hable con un profesional de salud mental si es necesario.