Cuando tienes un hijo con autismo y TDAH, las crisis son inevitables. Son difíciles y pueden hacer que sus propios niveles de estrés y ansiedad se disparen mientras intenta ayudar a su hijo. Para ayudar mejor a su hijo a superar una crisis, es importante que usted mantenga la calma. Pero, ¿cómo se hace eso durante una situación tan emocional? Siga leyendo para conocer cinco formas de mantener la calma durante la crisis de su hijo.
Las crisis son involuntarias
Una cosa que me recuerdo cuando mi hijo J tiene una crisis nerviosa es que son involuntarias. No está haciendo un berrinche porque no está consiguiendo lo que quiere. Está teniendo un colapso.
Una crisis generalmente ocurre debido a un abrumador sentido. Podría desencadenarse por diversos factores, como ruidos fuertes, olores fuertes, luces brillantes, cambios inesperados en la rutina o la pérdida de un juguete o artículo favorito. Esto resulta en un arrebato físico que podría incluir llorar, gritar, patear, golpear y/o morder.
Como padres, nosotros también somos humanos. Es angustioso ver a nuestros hijos pasar por algo tan traumático en este momento. Cuando sucede en público, es aún peor porque también puede resultar embarazoso. Puede sentirse juzgado por los demás mientras intenta ayudar a su hijo.
Sin embargo, mantener la calma durante esa situación es lo que su hijo necesita. No puedes ayudar a tu hijo si tú también estás en pánico. Sin embargo, es fácil de hacer y todos hemos pasado por eso.
Mantener la calma durante una crisis
Entonces, ¿cómo puedes mantener la calma durante la crisis de tu hijo? Me ha resultado útil hablar sobre las crisis con el terapeuta conductual de mi hijo para tener un plan para cuando suceda. Como parte de mi capacitación como padre con ella, hablamos sobre sus crisis, lo que sucedió y cómo puedo ayudarlo mejor en el futuro. Saber que tengo un plan en mi cabeza para cuando ocurran realmente ayuda.
También sé que algunos padres tienen cerca “kits de derretimiento” de artículos favoritos que pueden ayudar a calmar a sus hijos. Esto puede ser muy útil.
Aquí hay cinco maneras en que puede mantener la calma durante la crisis de su hijo:
1. Respira profundamente y mantén el nivel de voz bajo.
Una crisis aumentará su propia ansiedad. Para contrarrestarlo, respire profundamente unas cuantas veces para calmar los nervios y asegurarse de que su cerebro y su cuerpo reciban el oxígeno necesario. Cuando estamos ansiosos, nuestra respiración tiende a ser superficial, lo que causa aún más problemas.
Debido a que su hijo tiene una sobrecarga sensorial, no aumente esa sensación de agobio. Una forma de hacerlo es manteniendo el nivel de voz bajo. Hable lo suficientemente alto como para que su hijo pueda oírlo. Una voz más suave puede resultar tranquilizadora. Hablar en voz alta o gritar sólo agravará el problema y no ayudará a aliviar la situación.
2. Evalúe la situación y reconozca los sentimientos de su hijo.
Evalúe qué está pasando y qué está provocando el colapso de su hijo. ¿Hay un ruido fuerte que se puede detener o luces brillantes que se pueden apagar? ¿Hay algún juguete favorito cerca que pueda ofrecer consuelo? ¿Abrazar a su hijo ayudará o empeorará las cosas? Si estás en un lugar público, ¿cuál es la mejor manera de sacar a tu hijo de la situación? Descubrir el siguiente paso para calmar a su hijo puede ayudarle a sentirse más en control y a mantener la calma.
También es importante reconocer los sentimientos de su hijo. Sea comprensivo y hágales saber que no está enojado con ellos. Hágales saber que quiere ayudarlos.
3. Recuerda que las crisis no son racionales ni lógicas.
No culpe a su hijo ni a usted mismo por la crisis. Debido a que son el resultado de una sobrecarga sensorial, esto no es algo que su hijo elija hacer. No se basan en la lógica y tratar de sacar a su hijo de su crisis no funcionará.
4. Mantenga el control al desconectarse emocionalmente
Sentimos mucha empatía por nuestros hijos y tendemos a sentir sus emociones. Sin embargo, es posible que tengas que esforzarte en desconectarte emocionalmente durante la crisis para mantener la calma. Si te sumerges demasiado en sus emociones, te resultará difícil mantenerlas a raya mientras intentas mantener la compostura.
5. Dile a los demás lo que necesitas que hagan
Es importante que usted, como padre o cuidador, maneje la situación usted mismo. Sin embargo, si la crisis ocurre en público o entre amigos y familiares, es posible que tengas que decirles a los demás lo que necesitas que hagan. Por ejemplo, si sucede en una tienda, informe a la gente que su hijo tiene autismo y que necesita algo de espacio para ayudarlo a calmarse. Si hay objetos peligrosos cerca con los que su hijo podría lastimarse, pídale a alguien que los retire por usted. La mayoría de las personas quieren ayudar pero no saben qué hacer. Si la situación se convierte en una emergencia, pídale a alguien que llame al 911 por usted. Afortunadamente, la mayoría de las crisis no llegan a ese nivel, pero si es así, alguien te ayudará.
Después de que termine una crisis, asegúrese de tomarse un tiempo para calmarse. Estas situaciones son emocionales y agotadoras. Recuerda que debes cuidarte a ti mismo para poder cuidar mejor a los demás.
¿Tiene otras sugerencias sobre cómo mantener la calma durante la crisis de su hijo? ¡Compártelos en los comentarios!